Cambia la estación del año y damos la bienvenida a estancias de la casa que durante el frío invierno estaban en un segundo plano y apenas las mirábamos. Hablamos de las terrazas y balcones que vuelven a la vida para darnos un soplo de aire fresco y hacer que vivamos los mejores momentos; incluso si estos son en espacios más bien pequeños. 

Y es que hacer de tu terraza un espacio de lo más acogedor no solo depende de tu presupuesto. Con estos consejos de estilo (acompañados de su pauta funcional) puedes hacer que hasta te olvides de los metros cuadrados que realmente tiene esta zona de puertas para afuera de tu hogar. 

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Unas tupidas (o no) cortinas

Espacios

Cómo conseguir que tu balcón sea más privado y esté a salvo de miradas indiscretas

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Terraza con dos tumbonas de colores
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No te compliques (ni compliques el poco espacio)

Hotel Valletta Vintage

Justo lo imprescinidible

¿Qué solo nos da el presupuesto para cuatro cosas contadas? Pues nada, imaginación y mucho estilo al poder. Nuestra práctica terraza con un interiorismo perfecto gracias a un par de sillas de lo más originales y una pequeña mesa baja para dejar cosas. Y ya si nos sobra algo de dinero, el toque verde en forma de maceta o planta que no falte. 

Terraza rústica con tumbona blanca en algodón
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Lo que a ti te guste (o necesites)

Bureaux House Oeteman 45

Un solo invitado

Si la idea de tu terraza es que (salvo contadas ocasiones) sea para ti, con unos pocos elementos (precisos y preciosos eso sí) puedes construirte un espacio de lo más acogedor en pocos metros cuadrados. Echa mano de una butaca o tumbona confortable y original y coloca una mesa baja para dejar ese café que disfrutas en tu rato de lectura por la tarde. 

Y cuando llegue el invierno y no uses ese espacio, recoge estos sencillos muebles para cuando vuelva la temporada primaveral. 

Mesa alta redonda de madera con taburetes tapizados
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Mirándonos a la cara

Hotel THE REBELLO

¿Cuántos seremos esta noche?

En cambio si tu terraza o balcón es el punto de reunión de amigos y familia cada verano, nada como aprovechar bien los pocos metros cuadrados que tenemos para cumplir con perfectos anfitriones. ¿Qué te parece una mesa alta rodeada de taburetes para esas divertidas cenas informales al llegar la noche? No te ocupará nada de espacio en un rincón y los buenos ratos están más que asegurados.

Mesa y tres sillas de metal para esta terraza
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Muebles sencillos y que ocupan poco

Tikamoon

Ligereza con estilo

Si no te sobra el espacio, olvídate de saturar la terraza con muchos muebles o bien que estos sean demasiado protagonistas, pesados o aporten mucho ruido visual. Para zonas tan pequeñas nuestro consejo de estilo (y de funcionalidad) viene de la mano de sillas y muebles ligeros que no ocupan apenas espacio. Y si además son plegables sumas un punto de más en practicidad y comodidad. 

Terraza de madera con mesas y sillas
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Y de la luna

IKEA

A la luz de los farolillos

O de las pequeñas bombillas que cuelgan sobre la mesa de nuestra pequeña terraza. Y es que en estos espacios reducidos tan importante es saber elegir bien el mobiliario como hacer lo propio con la iluminación precisa. No necesitas grandes lámparas de pie que te estorban y te deslumbran. Mejor divertidos farolillos o una guirnalda de pequeñas luces para crear una atmósfera de lo más acogedora. 

Dos butacas y una mesa de fibras naturales
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Antes de entrar en casa

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Un pequeño descanso

Hasta el rincón más pequeño (incluso si este es de paso a la puerta de entrada de la casa) nos puede servir para habilitar un coqueto apartado para el descanso. Algo así se ha solucionado en esta terraza con estas dos butacas y la mesa baja (todo de fibra natural) para ese hueco relajante. 

Terraza con disposición de plantas y sofá en beige
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Siempre hay hueco para una plantita

IKEA

El verde es imprescindible

Da lo mismo si no tienes apenas sitio para poner una pequeña silla; una mini planta al menos te entra. Y es que estos elementos de verdor natural no ocupan nada y aportan mucho: aire acogedor, ambiente más fresco y un toque de calidez natural que hace que hasta el rincón más frío resulte encantador.