18 plantas de interior que no necesitan luz natural (o muy poca) para decorar tus estancias

1. Bromelia Aechmea

¿Sabes qué son las bromelias? De origen americano, las bromelias son una planta tropical de interior que nos cautiva con sus colores vistosos. A nivel decorativo, además de verde, añadirán color a la decoración. Son ideales para interior, ya que no necesitan el contacto de la luz directa, de hecho, los rayos del sol podrían quemar sus hojas y pétalos, y sobreviven perfectamente bajo la luz artificial o de ambiente.

2. Potos o pothos

Los potos son, seguramente, una de las plantas más usadas para decorar interiores (tanto luminoso como más oscuros). Esto es debido a que crecen rápido, no necesitan luz natural y son la planta colgante perfecta. Además, requiere pocos cuidados. Eso sí, ve con cuidado con las hojas amarillas, podría ser debido a que recibe demasiada luz. 

3. Lirio de la paz

La flor de paz o también conocida popularmente como lirio de paz, es originaria de los bosques lluviosos de América. Otra planta de interior que no necesita mucha luz natural. Requiere de luz indirecta para que crezcan el máximo de flores posibles, aunque, en el caso de no tener nada de luz, seguirá creciendo. ¡Es ideal para impacientes, crece muy rápido!

A modo de curiosidad, la parte blanca de esta planta no es una flor, sino una hoja protectora de la flor amarilla que esconde en su interior. Sea como sea, la combinación de hojas verdes y blancas aportan elegancia y se convierten en la opción ideal para decorar espacios de cualquier estilo decorativo. ¡Pura versatilidad y un regalo perfecto!

4. Sansevieria

La Sansevieria es otra de esas plantas a las que recurrimos de forma habitual para decorar nuestros interiores. Y es que, además de ser muy fáciles de cuidar, también nos ayudan a filtrar y purificar el aire de forma natural. Conocida también como Lengua de Suegra o espada de San Jorge, esta planta es perfecta para principiantes, ya que no necesita luz natural, puede cultivarse en cualquier espacio y requiere muy poco riego. 

Su tendencia de crecer en vertical y el color de sus hojas la ha convertido en una planta ideal para cumplir una función decorativa, sobre mesas y estanterías o en el suelo si se trata de un ejemplar grande. 

5. Helecho culantrillo

Hay infinidad de variedades de helechos, pero el helecho culantrillo es el ideal para decorar el interior de casa. Les encanta la sombra, no necesitan luz natural directa y requieren de mucha humedad. Ideales para el baño o la cocina.

6. Aloe vera

No es un cactus. Es una planta suculenta de las más buscadas y usadas en el mundo, tanto por los beneficios del gel de sus hojas como por su poder decorativo. Aunque en la naturaleza suelen crecer en zonas soleadas e incluso desérticas, la verdad es que existen variedades de aloe vera que resisten bien a los ambientes con poca luz. Además, necesitan poca agua. 

8. Zamioculca

La Zamioculca o también conocida como ZZ, es una planta de interior muy fácil de cuidar, de hoja perenne y muy resistente. Necesita poca luz solar para sobrevivir, de hecho, puede colocarse en espacios interiores sin ventanas, simplemente se debe compensar con luz artificial. 

¡Importante!, no colocar en espacios de poco uso donde la luz permanece apagada la mayor parte del tiempo. También es resistente a las plagas y enfermedades y requiere de poco riego. 

9. Begonia

Las begonias son una de esas plantas con flor clásicas. Aunque también existe una variedad sin flores. Como planta tropical, es perfecta para espacios interiores con poca luz y no demanda muchos cuidados.

Si bien, esta planta tan común se ha adaptado a todos los climas y ahora también podemos usarla para decorar jardines y espacios exteriores. Sin lugar a dudas una de las plantas más versátiles de esta selección.

10. Peperomia

La peperomia es otra planta de interior muy sencilla de cultivar y de cuidar. Si bien la mayoría de las peperomias prefieren niveles moderados a altos de luz indirecta, hay algunas variedades que pueden tolerar niveles bajos de luz, entre ellas destacan la peperomia obtusifolia, la peperomia de cola de ratón y la peperomia scandens.

11. Calathea

La calathea es una planta nativa de América tropical, por lo que es una excelente opción para decorar el interior de casa. No necesitan luz directa, pero sí que deben vivir en zonas húmedas o en estancias con humidificadores. Su principal atractivo recae en las bonitas hojas que combinan diferentes tonalidades de verde hasta llegar a tonos blancos o amarillentos.

13. Cintas

La cinta, también conocida como malamadre, planta de araña, planta lazo o lazo de amor, es una planta de interior muy usada en interiorismo y decoración. Se trata de una especie que no necesita luz natural, ya que el sol directo puede quemar sus hojas con facilidad. Lo ideal es colocarla en una zona con luz indirecta. No necesita muchos cuidados, crece fácilmente y es una de las plantas de interior más duraderas.

Ya has visto que son muchas las opciones de plantas de interior que necesitan poca luz natural, por lo que son una opción perfecta para pisos interiores. Eso sí, no sabrás qué te gustarán más, si estas o las plantas de exterior que están arrasando este año y que son una opción a tener en cuenta para la terraza, el blacón o el jardín.

14. Menta

Aunque la menta sí necesita de más cantidad de luz natural para estar en buenas condiciones y crecer, en general es una planta de interior que necesita poca luz, ya que el sol directo puede dañarla fácilmente. Y, además, su olor la convierte en una planta perfecta para tener en la cocina a mano y usarla en algún plato.

16. Aspidistra

Conocida como la “planta de hierro” por su increíble resistencia, la Aspidistra es todo un clásico. Tolera la sombra, los cambios de temperatura e incluso algo de descuido, lo que la hace ideal para quienes no tienen mano con las plantas. Sus hojas alargadas, de un verde brillante, crecen despacio. Es perfecta para decorar recibidores, pasillos o cualquier rincón olvidado que necesite un toque de vida sin demasiadas complicaciones de luz.

18. Zamioculcas negra

La Zamioculca negra se ha convertido en una favorita de los interioristas gracias a sus hojas de un tono púrpura casi negro. Esta variedad es muy resistente y puede colocarse en rincones con escasa luz. Tampoco necesitará muchos cuidados, basta con un riego esporádico y un sustrato bien drenado. Perfecta para espacios minimalistas donde aporta contraste.