Los 25 restaurantes con mejor diseño de Barcelona

Salir a comer o cenar fuera es una de las pasiones de la sociedad de hoy en día. Se ha convertido en una forma de disfrutar de los placeres de la comida, pero también en una de las principales formas para socializar con familia, amigos e incluso compañeros de trabajo.

Es evidente que, a la hora de elegir un restaurante al que ir, lo más importante debe ser la comida. Pero, igual que la comida entra por los ojos, también lo hace el sitio. El ambiente del restaurante, su diseño y decoración de interiores pueden decantar la balanza de un lado u otro. Al final, se busca la experiencia completa en la que disfrutar con los cinco sentidos de todo lo que hay alrededor.

Por eso, esta selección reúne los 25 mejores restaurantes de diseño en Barcelona, donde el interiorismo es una parte fundamental del conjunto de la experiencia. Sobra decir que en todos ellos la comida es de la más alta calidad y con un proceso creativo detrás fuera de serie. Pero en este caso hablaremos de su diseño interior. ¿Te animas a probar alguno?

25 restaurantes de Barcelona con interiores de diseño

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Gala

Gala, también del Isabella’s Group y diseñado por Quintana Partners, es pura alegría, surrealismo y color. Cada una de sus salas es un concepto diferente que se entremezcla en un espacio lleno de encanto. En su salón-comedor se puede disfrutar de la gastronomía informal de buen producto sin artificios, el bar tiene una barra de sushi (y un tíovivo), en la disco se puede bailar la mejor música y su librería tiene un escenario y propuesta de cócteles cuidadosamente seleccionados. Y para los que necesitan un respiro en plena ciudad, su maravilloso patio interior alberga un jardín agradable y divertido con una nariz muy daliniana como centro.

Bodega Bonay

Bodega Bonay, situado en el hotel homónimo Casa Bonay, es un templo del vino natural y de los productos de calidad. El hotel y los distintos restaurantes que alberga, han sido fruto de la colaboración de varios artistas, creativos, paisajistas, y diseñadores industriales, entre otros. La iluminación juega un papel clave, donde la calidez ha sido siempre el objetivo a seguir. Nina Masó, editora de iluminación en Santa & Cole ha asesorado todo el proyecto de luminarias, creando, al final, un juego de lámparas inspiradas en la luz de las velas y los cigarrillos encendidos.

El estilo industrial reina en Bodega Bonay, con paredes de piedra, tuberías vistas y afiches en las paredes. La madera de los muebles y las tapicerías en terracota son las encargadas de crear un ambiente acogedor.

Si este restaurante será vuestra próxima parada para una cota romántica o una cena íntima entre amigos, os invitamos a descubrir más, sobre el uno de los hoteles de moda de Barcelona, visitando Libertine, el Chiringuito o Satan’s Cofee Corner, además del hall y los pasillos.

Little Andaman

Los sabores de la costa sur de la India llegaron a Barcelona hace poco más de dos años. Little Andaman es el hijo pequeño del Grupo Bembì, asentado en la Ciudad Condal desde hace 15 años, y el que fue pionero en la introducción de la comida india en Barcelona. La carta, pensada para un público local, presenta recetas que te trasladarán a la Bahía de Bengala, obviando la baja selva, claro.

El interiorismo está firmado por Motel Studio, y juega un papel clave en el restaurante. Sillas de ratán, palmeras kentia, cuadros en colores sólidos, plumeros y suaves tapizados en color pastel invitan a una cena relajada y divertida, donde cada rincón es susceptible a foto. Como bien dice Guillem Mas, director gastronómico, “los clientes locales deciden si les gusta un local o no antes de sentarse. Así que este restaurante debía entrar por los ojos”. Cocina y decoración huyen del tópico y estereotipado restaurante indio.

Julieta's

Julieta’s se ha convertido en el restaurante más ecléctico de Barcelona, gracias a su inspiración en la Ibiza de los 60, la artesanía y las paredes encaladas. El interiorismo de la última inauguración del Grupo Isabella’s la firma el estudio Dalla Polvere, con Patrizia Cassarini y Mónica Colominas al frente.

La mezcla de estilos siempre es un acierto cuando se trata de decorar locales únicos donde el interiorismo sea el protagonismo. Este es el caso de Julieta’s, un restaurante que combina la frescura del estilo ibicenco, con muebles y estampados inspirados en los años 70 y detalles artesanales a base de fibras naturales, cerámica y macramé.

Eso sí, no os esperéis un restaurante al más puro estilo italiano, los arroces y la brasa son los auténticos protagonistas.

Mr Porter

Este elegante restaurante, ubicado en el Hotel Sir Victor a tan solo unos pasos del Paseo de Gracia, es un paraíso para los amantes de la gastronomi´a, el disen~o y el buen ambiente. Detra´s de su concepto, se encuentran los emprendedores de la hosteleri´a Yossi Eliyahoo y Liran Wizman, propietarios y fundadores de The Entourage Group, junto con la CEO del grupo Stephanie Eliyahoo. Pero el diseño se debe al trabajo de BK Architects, con aires mediterra´neos y cosmopolitas en un entorno elegante y acogedor de di´a, asi´ como rebelde y atrevido al caer la noche, donde los comensales pueden disfrutar también de un ico´nico bar de 360 grados.

Su oferta gastrono´mica juega con los extremos, presentando un innovador menu´ que fusiona a la perfeccio´n carnes de alta gama y una variedad de exquisitos platos de verduras. MR PORTER también destaca por sus atrevidos co´cteles con enfoque culinario, que destruyen la tradicional barrera entre bar y cocina mezclando ingredientes de ambos mundos. Y para rematar, han creado un exclusivo acontecimiento mensual, A Night With The Fox, donde se mezclan gastronomía, espectáculo y la mejor música a cargo de sus DJs.

Parking Pizza

El Parking Pizza te desvela su secreto en su primera palabra. El restaurante se encuentra en una planta subterránea prácticamente clandestina que han creado Marcos Armentera y Berta Bernat.

Lo puedes encontrar en el Passatge Marimon en un espacio que luce una cocina abierta, de puros espectáculos gastronómicos, que se puede observar desde una de las tres grandes mesas que reinan la sala. Sin muchas complicaciones, el diseño de los interiorioristas está pensado para centrarse en comida, con un estilo muy informal que se aleja intencionadamente de querer darle un concepto desvinculado a la propuesta de comida.

El Nacional

El Nacional es una de las dos huellas que ha dejado en Barcelona el magnífico Lázaro Rosa-Violán, un espacio donde reina la elegancia y una decoración impecable que nos transporta directos a unos exquisitos años veinte de puro lujo.

Tiene hasta ocho zonas diferentes en una nave industrial de más de tres mil metros cuadrados que se presenta como un neomercado gourmet lleno de vida y color.

Baldomero

Inspirado en el nombre de su dueño anterior, este garage del Passatge de Mercader, en el Eixample, se ha convertido en todo un refugio donde respirar la calma no solo por su aire rústico desenfadado y alejado del frenetismo de la ciudad, si no también por el juego de texturas y tonos rosados que bañan el local de un lado a otro.

Diseñado por su actual propietario, David Carbó, junto con la directora creativa Antonella Tignanelli, integra minimalismo con referencias campestres en un ambiente bucólico concebido como una masía urbana. Su iluminación, de Santa & Cole, también es uno de los elementos característicos que combinan a la perfección con la madera, los jarrones de arcilla, los techos ondulados y los cojines de colores.

Teatro kitchen Bar

Como su propio nombre indica, el Teatro cumple lo que promete: un interior de cine. Ya sea por su clara temática teatral reconocible en los carteles que lo decoran como por su característico suelo mosaico de Gaudí que Albert Adrià decidió ( y acertó de pleno) conservar, el ambiente sofisticado y escénico que debía transmitir el que fue el antiguo Tickets sigue respirándose, ahora en forma de restaurante.

Más allá de los detalles, te impresionaran sus cuatro cocinas abiertas, las luces y los carteles de leon y la iluminación sirven como una invitación en toda regla a esta recien estrenada obra teatral.

Ikoya Izakaya

Son muchos los locales japoneses que recorren las calles de Barcelona con personalidades fusionadas y que se alejan de las tabernas niponas tradicionales. Esta Izakaya es, posiblemente, una de las más fieles que podrías ver en las calles de Tokio, con una barra protagonista donde disfrutar y compartir la experiencia gastronómica.

En pleno Born, frente al mercado de Santa Caterina, tenéis este templo de la comida de mercado y el sake que ha transformado Txema Retana inspirándose en un ambiente zen donde la iluminación cumple un papel muy importante. Sus aliados han sido también maderas nobles, hierro, telas y hasta papel de diario en las composiciones.

Flying Monkey

El Flying Monkey tiene los dos elementos necesarios para cualquier 'wine bar': es acogerdor y tiene buenas propuestas de picoteo. Su concina está prácticamente a pie de calle y sirven todo tipo de bocadillos sencillos para acompañar cualquier velada, con la mirada en la gastronomía de Oriente Medio.

El paraíso que ofrece Flying Monkey se degusta en un pequeño espacio que se ha firmado con dos nombres que de presencia únicas: The Thing Thinks y Espacio en Blanco, y que que puedes encontrar en la calle d'Amigó del barrio de Sant Gervasi.

Fiskebar

También del grupo Tragaluz, el Fiskebar es uno de los restaurantes nórdicos más solicitados de la ciudad, situado en el Reial Club Marítim de Barcelona, en el Port Vell de la ciudad. Su interiorismo está firmado por Isern Serra, ya presente en la firma de varios locales de moda de Barcelona.

El concepto del restaurante es un espacio raw, auténtico y matérico, donde la artesanía tiene un papel muy protagonista. El espacio es limpio y minimalista y su sala principal se compone de suna cristalera voluminosa y una barra central que se dinamiza con la presencia de los productos del mar y de la tierra.

El japonés escondido

Con una mesa larga para compartir espacio y comer en comunidad y una iluminación ténue que pretende transportarnos a japón, esta Izakaya es posiblemente la gran obra maestra de Grupo Tragaluz. Firmada por Leukona Studio, en una pequeñísima calle del barrio de la Barceloneta se esconde este ya no tan desconocido paraíso japonés.

La barra del restaurante, como en una antigua taberna japonesa, está protagonizada por unas enormes estanterías repletas de cajas, cajones, archivadores y cerámicas, y acompañada de una sillas vintage de estilo nórdico con asiento en cuerda, un diseño de Børge Mogensen. La filosofía del proyecto es usar poco y bueno y reutilizar siempre que se pueda y te aseguro que el espacio es digno de señalar en el mapa con un gran círculo rojo.

Chandigarh Café

En un jardín de Pedralbes, envuelto por un patio de árboles y uno de los diseños más clásicos de la ciudad, el Chandigarh Café es un espacio inspirado en la ciudad asiática que lleva este nombre y que fue diseñada por Le Corbusier. La reforma de lo que anteriormente había sido una casa la llevó a cabo Paula Ospina junto a Beatrice Mas y Tomás Tarruella Abadal, hijo del conocido empresario de restauración del mismo nombre. El objetivo era que "la gente viviera con simplicidad y alegría", y lo consiguieron a través de sus texturas y colores, que juegan con los tonos verdosos y rosados del mobiliario, entre los que encontramos las clásicas sillas Chandigarh diseñadas por Pierre Jeanneret, primo y colaborador de Le Corbusier.

Su aspecto te invita a pensar en los decorados de los cincuenta pero escondido dentro de una cabaña de ladrillo que, para rematar, te ofrece una carta donde destacan sus pizzas al horno de leña. Pero todo esto funciona en un perfecto equilibrio sin dejar de hacer homenaje a su predecesor.

Flash Flash

Un clásico entre los clásicos, y un icono de la ciudad de Barcelona. Flash Flash es el restaurante fundado por Alfonso Milá, Cecilia Santo Domingo, Leopoldo Pomés y Karin Leiz y decorado por el mismo Milá y por Federico Correa.Su diseño pop y setentero, el blanco puro y las fotografias de Leopoldo Pomés, han convertido a este restaurante especializaco en tortillas en un referente y símbolo barcelonés.

El impacto de modernidad sigue intacto cinco décadas después sin apenas modificaciones. Tan solo alguna ligera actualización, incorporando en 2014 una nueva barra de ensaladas diseñada por el estudio de arquitectura Llamazares Pomés y una pequeña modificación en la iluminación, añadiendo lámparas rojas M68 del diseñador Miguel Milá.

Gats

Si hablamos de restaurantes inmersivos y que su decoración esté a la altura de su carta, posiblemente el Grupo Tragaluz aparezca varias veces encabezando la lista. En el extremo más céntrico del Raval encontramos este paraíso industrial donde la piedra y la madera recorren todo este espacio que homenajea los 'bares de barrio' en una versión mucho más modernizada, en el cruce de las calles Pintor Fortuny y Xuclà, a escasos metros de las Ramblas.

Déjate impresionar por el interior de este bar de tapas que luce mesas alargadas de madera natural, lámparas de hierro colgantes y taburetes negros que mezclan el estilo más industrial con el de las tabernas nórdicas.

Salvaje

Con un nombre tan sugerente, no se podía ir a lo seguro. Salvaje, presente en varios países del mundo, poseen el segundo restaurante más grande de la ciudad. Una experiencia espectacular que comenzó en Panamá y que ha conquistado hasta a artistas y famosos de Hollywood y de otros rincones del mundo.

En Salvaje se puede disfrutar de una gastronomía de fusión japonesa mediterránea, pero sobre todo de un diseño arquitectónico exquisito y original que se va transformando cuando cae la noche. Además, 14 comensales por noche pueden vivir la experiencia Omakase, que en japonés significa "ponerse en las manos del chef", en la que degustarán los platos realizados por el propio chef, Fermín Azkue, mientras les da una explicación detallada de cada uno. Elegancia, tradición y diseño conforman un mundo salvaje digno de visitar.

A priori

Este local que pertenece a Inés Arroyo, influencer y fundadora de Lagaam es todo un descubrimiento para los amantes de la Barcelona más fiestera. Sus dos espacios, diferenciados en dos plantas, muestran las dos caras de la moneda que ofrece un bar-restaurante que, por la noche, baja la iluminación y se viste de gala en su planta inferior.

El estilo retro se respira en todo el local y, una vez más, lleva la firma de los dos jóvenes infalibles de la moda de interiorismo catalan, Quintana Partners, que siguen lavando la cara de aquellos edificios que rescatan para convertirlos en territorio de la modernidad y el arte urbano.

Carmina

Una de las aperturas de diseño más recientes es Carmina, un lugar donde la cocina tradicional catalana se funde con un ambiente moderno y único. Ubicado en el histórico Senyor Parellada, Carmina ha querido ser muy respetuoso con el legado que esto implica, por lo que su chef, Josep Maria Massó, ha elaborado una propuesta que lleva la cocina de siempre a las generaciones de hoy en día con platos actualizados. Este restaurante del Isabella’s Group ha sido reformado por Quintana Partners con la idea de revivir el resplandor de la mejor época de esta fonda catalana.

El proyecto se ha construido alrededor del patio central acristalado, desbordado de plantas, cuyas pinturas originales han sido restauradas. El espacio respira también el ambiente de una casa colonial cubana y los colores cálidos, rojizos y texturas de ratán evocan al Caribe con un toque cosmopolita. Una cocina clásica y abierta, en naranja, contribuye al bullicio de los comensales y deja adivinar las cocciones y los olores de la carta.

Maná 75

No podía faltar un restaurante cerca de la playa. Al lado del Hotel W, Maná 75 ha creado un lugar muy espacioso, a la par que acogedor. Con un carácter mediterráneo informal, la luz natural lo inunda de día y la tenue iluminación de noche.

Lo más llamativo son sus telas, que tapizan asientos e incluso el techo sobre las mesas redondas que invitan a reunirse y a compartir. Un lugar con la esencia de la Barceloneta donde no podía faltar la terraza y el jardín. La gran cocina abierta se ha integrado en el espacio como parte de la experiencia, donde los comensales pueden acercarse a ver cómo se prepara su comida o las 19 paelleras que no dejan de humear.

Feroz

Este restaurante se podría definir como una jungla. Un lugar muy sofisticado que deslumbra por su cantidad de detalles allá donde mires. El interiorista Pablo Peyra y su equipo se encargaron de diseñar este atrevido lugar en diferentes espacios.

La zona principal consiste en un comedor amplio con algunas cristaleras de separación para hacer más íntima la experiencia del comensal. Las mesas de madera se combinan con diferentes asientos de terciopelo y mimbre. Todo su pavimento es de madera de roble y las paredes están recubiertas de diferentes papeles pintados de la marca BN Walls. Respecto a la decoración, predomina todo tipo de vegetación colgante, una gran variedad de espejos e iluminación de estilo barroco, pero se pueden encontrar detalles escondidos de todo tipo.

Disfrutar

Pocas palabras bastan para describir a Disfrutar: tercer mejor restaurante del mundo en 2022. Todo se ha dicho sobre su menú degustación, sus creaciones de vanguardia y sus materiales de primera calidad. Pero hoy, en Interiores, vamos a hacer una mención especial a su interiorismo que, aunque no lo sepáis, también juega un papel importante en la entrega de Estrellas Michelin.

Entre la multitud de premios que colecciona, el restaurante barcelonés también ha ganado premios en lo que a diseño se refiere, como por ejemplo ganador a mejor revestimiento en 2015 en los Restaurant & Bar Design Awards.

La cerámica nos acompaña durante todo el recorrido, que pretende transmitir: naturalidad, humildad y respeto a la historia y herencia del Mediterráneo. Pero en cada uno de los espacios se transforma en un nuevo material que nos ayuda a dotar cada zona de singularidad.

Por otro lado, la zona de acceso busca referencias más urbanas como las estructuras metálicas del mercado del Ninot, situado al otro lado de la calle, a la vez que utiliza la cerámica de forma colorista, casi artística, con azulejos monocromáticos que nos envuelven en un gran mural casi “mironiano”.

Alkimia

En esta lista no podía faltar el restaurante que ganó el Premio Internacional de Diseño al Mejor Restaurante en 2017. El proyecto del chef Jordi Vilà fue diseñado por el estudio External Reference como un espacio innovador que, mediante la iluminación cambiante según la estación del año, hace que se viva en constante cambio.

Su interior grita contemporáneo por todas partes, inspirado en el mar al igual que la propuesta gastronómica. Se muestran recreaciones propias del mundo marino, como un banco de peces o una gran espina dorsal que conecta las diferentes zonas del restaurante. Pero lo más característico es el uso de la tecnología, ya que se utilizan proyecciones de mapping o materiales cortados a láser. Todo ello acompañando a unos frescos en el techo de hace más de 50 años que se encontraron en perfectas condiciones.

Spicy Volx

Situado en pleno centro del barrio de Sant Antoni, Spicy Volx se presenta como una taberna oriental, fusionando lo mejor de la comida asiática con el concepto informal y tradicional de las tabernas españolas. Inspirado en el continente asiático, al más puro estilo Street Food, Spicy Volx desprende estilo y carácter: neones, dibujos psicodélicos, erotismo y visuales acompañados de Rap de los años 90 y música Funky.

Bar Galán

Tiene poco más de un año de vida, pero este restaurante "sin floripondios" se ha convertido en el bar de moda de l'Eixample barcelonés. Bar Galan se presenta como un local donde pedir "lo de siempre" - cocina de mercado - y donde disfrutar de un ambiente acogedor y moderno a partes iguales, firmado por la interiorista Nora Batlle. El color terracota y la tortilla trufada se han convertido en su sello de identidad.