Pita: la planta más resistente al sol directo para jardines, terrazas o patios sin sombra

Si vives en una zona donde el sol cae sin piedad y las plantas se marchitan a la primera ola de calor, tenemos buenas noticias: la pita, también conocida como agave americana, puede ser tu nueva mejor amiga. Esta planta de aspecto exótico, con sus hojas gruesas y puntiagudas, no solo sobrevive, sino que florece bajo el sol directo, convirtiéndose en una opción ideal para jardines mediterráneos, terrazas soleadas y patios minimalistas. ¡Eso sí, tendrás que tener un espacio amplio a su disposición!

En este artículo queremos contarte todo lo que necesitas saber sobre la pita, sus características, qué tipos de agave hay, sus cuidados y dónde colocarla en tu jardín para que luzca en todo su esplendor.

¿Qué es exactamente la pita y por qué es tan resistente?

La pita es una planta suculenta originaria de zonas áridas de América Central y del Norte, aunque hoy en día es común verla en jardines cerca de la costa, en parques y zonas rurales de toda España. Perteneciente al género Agave, destaca por su capacidad de retener agua en sus hojas carnosas, por eso es tan resistente a la sequía y al sol.

Esta característica la convierte en la compañera ideal para esos rincones donde pocas otras plantas sobrevivirían. ¿Tienes un jardín sin sombra, orientado al sur y con temperaturas extremas en verano? Entonces la pita es tu planta, además, no necesita mucho mantenimiento.

Los tipos de pita más comunes

Aunque muchas veces se habla de la pita como si fuera una sola especie, lo cierto es que existen distintos tipos de agaves que se engloban bajo este nombre. Aquí te damos los tipos más conocidos y decorativos:

Agave americana. También conocida como pita amarilla, es la más habitual y también la más imponente. Sus hojas pueden superar el metro de largo, formando una roseta espectacular. Se presenta en tonos verde grisáceo o con márgenes amarillos, lo que le aporta un toque decorativo muy diferencial.
Agave americana ‘Marginata’. Una variante de la anterior con bordes amarillos cremosos. Aporta un contraste de color muy decorativo y destaca especialmente cuando se combina con grava blanca o piedra volcánica.
Agave attenuata. Más suave y de menor tamaño, sin espinas peligrosas en los bordes, lo que la hace perfecta para terrazas o jardines con niños. Sus hojas tienen una forma más arqueada y elegante. También es ideal para macetas grandes.
Agave parryi. De tamaño más compacto y con un tono azul grisáceo muy estético. Perfecta para rocallas o jardines pequeños donde el espacio es limitado.
Pita roja grande. Aunque no es un agave, el Phormium tenax, conocido como lino de Nueva Zelanda, se ha ganado el nombre de “pita roja” por su apariencia similar. La variedad ‘Purpureum’ o roja grande destaca por su follaje de color granate oscuro, casi burdeos, que añade un contraste espectacular en jardines modernos.

una planta pinta en un macetero grande en el patio

¿Cómo se cuida la pita? Trucos para tenerla siempre espectacular

Una de las grandes ventajas de la pita es que necesita poquísimo mantenimiento, pero como todo en jardinería, hay algunos consejos que conviene seguir si quieres que luzca siempre en su mejor versión.

Como te comentábamos al principio, la pita necesita mucho sol. No la pongas a la sombra o en un lugar húmedo porque no lo soportará bien. Cuanto más sol reciba, más compacta y bonita crecerá.

Por otro lado, prácticamente no va a necesitar que la riegues. En verano, puedes regarla una vez cada dos o tres semanas si ha hecho mucho calor. En invierno, ¡ni te preocupes! Evita los encharcamientos a toda costa. Si la tienes en maceta, asegúrate de que tenga buen drenaje y usa una mezcla para cactus o suculentas.

¿Florece la pita?

Sí, pero hay truco. La pita florece solo una vez en su vida, generalmente tras muchos años (a veces hasta 20 o 30), produciendo un espectacular tallo floral que puede alcanzar varios metros de altura. Este evento marca el final del ciclo vital de la planta madre, que muere tras la floración. Sin embargo, antes de irse, suele dejar hijuelos (pequeñas pitas nuevas) alrededor, que podrás replantar.

Dónde colocar la pita

La pita es una planta de carácter. No es para esconderla entre flores. Es perfecta para jardines amplios, donde puedas crear composiciones de inspiración mediterránea, minimalista o desértica. Combina genial con materiales como piedra, madera natural o cerámica. También puedes colocarla junto a otras suculentas, cactus o aloes.

Como no requiere muchos cuidados ni riego habitual, es la planta perfecta para casas vacacionales o segundas residencias. En la terraza, puedes optar por ponerla en una maceta XXL, o en un patio, rodeada de grava blanca, cerca de la piscina.

Con una pita en tu jardín, el sol dejará de ser un enemigo, pero si quieres otras opciones para tu espacio exterior, aquí tenemos una selección con 25 plantas que resisten muy bien al sol y son perfectas para añadir verde a tu terraza.