Anna Maresch, de Roca: "Un 78% de las personas encuentra la paz y la tranquilidad en su baño"

El baño ha dejado de ser un área secundaria y ha adquirido el estatus de auténtico santuario personal. En el vertiginoso ritmo de la vida contemporánea, ya no se ve únicamente desde su función utilitaria, destinado a la higiene básica, sino como un refugio donde el autocuidado y la búsqueda de equilibrio se erigen como los verdaderos protagonistas. Esta transformación queda reflejada en una reciente encuesta realizada por Roca, firma española líder en el sector, que revela un cambio de paradigma: el 78% de los encuestados, entre 18 y 65 años, considera este espacio el rincón de la casa
donde encontrar paz y tranquilidad.

Colección de baño integral Ona.

Foto: Roca

“Más que ninguna otra estancia, el baño se ha convertido en un verdadero templo del bienestar como fruto de una serie de cambios sociales y culturales que nos afectan a todos”, apunta al respecto Anna Maresch, directora de Marketing, Comunicación y Producto del Grupo Roca en España y Portugal.
Teniendo en cuenta que se estima que pasamos cerca de mil días de nuestra vida en él, no es sorprendente que casi ocho de cada diez personas lo consideren un valioso aliado para la serenidad y el descanso. Indudablemente, esta sensación está estrechamente vinculada con el cuidado personal.

Así lo confirma el estudio: cuatro de cada diez encuestados afirman usar el baño a diario para crear momentos de autocuidado, incorporando rituales como tratamientos capilares, el uso de jabones aromáticos, aceites esenciales o exfoliaciones corporales.

Ducha inteligente Smart Shower.

Foto: Roca

Dedicar estos minutos al día para conectar con el cuerpo no solo tiene efectos positivos en lo físico, sino que también fortalece el bienestar emocional. De hecho, el 74% de la muestra asegura que ducharse o bañarse les ayuda a reducir el estrés, ya sea al final del día, como un respiro tras la jornada laboral, o por la mañana, para empezar con energía.

En este contexto, la tecnología juega un papel clave en esta experiencia transformadora. Innovaciones como la Smart Shower permiten ajustar tanto la temperatura como el caudal del agua según las preferencias individuales. Gracias a su sistema de control mediante paneles o aplicaciones móviles, cada miembro del hogar puede personalizar su ducha, asegurando un confort a medida.

Bañera Ariane.

Foto: Roca

Mención aparte merece la bañera, un elemento sencillo, pero elegante, que tiene el poder de transformar un espacio cotidiano en un auténtico spa personal. Si bien su uso más frecuente está vinculado a momentos de relajación, especialmente durante los fines de semana, cuando se dispone de más tiempo libre, sumergirse en ella transforma un baño rutinario en una experiencia revitalizante para cuerpo y espíritu.