NO cuelgues los espejos: 12 ideas de espejos apoyados en el suelo (o sobre muebles) que son un acierto

Amplían el espacio, multiplican la luz, aportan profundidad, nos facilitan la rutina… A los espejos les sobran las razones para tener un hueco de honor en la decoración de la casa. Aunque normalmente los colgamos de la pared, no es la única manera de incorporarlos a nuestras estancias. Apoyarlos en el suelo o sobre un mueble es otra fórmula de sacarles partido y mostrar una versión más informal y desenfada, aunque igual de sofisticada. Además, permiten colocar modelos XL que colgados pueden ser demasiado pesados y son una buena opción para todos los estilos decorativos. Estas 12 propuestas son toda una inspiración.

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Espacios

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En el recibidor

Apoyarlo sobre el aparador o la consola del recibidor es todo un clásico en este espacio, donde no suelen sobrar los metros y es necesario un espejo para revisar que maquillaje y outfit son una buena elección. Colgarlos te limita el tamaño, mientras que si lo apoyas en un mueble, puedes optar por un modelo más grande que incremente sus posibilidades. Sin olvidar, que son perfectos para ampliar e iluminar las entradas XS u oscuras.

Sobre la chimenea

La chimenea es uno de los lugares especiales, donde los espejos son siempre bien recibidos. Si quieres evitar el 'efecto trofeo', que puede producir, en ocasiones, un espejo colgado bien centrado, apoyarlo sobre la repisa aportará un toque informal, pero muy sofisticado, al que es difícil resistirse. Una buena idea tanto en ambientes de estilo clásico, como actuales o campestres, siempre que elijas el marco adecuado.

De cuerpo entero en el comedor

Concretamente en la pared frente a la mesa. En esta propuesta, el espejo XL actúa como una ventana, que aporta profundidad, multiplica la luminosidad y destaca la mesa y las sillas del comedor. El marco potencia aún más ese efecto y aporta un plus de sofisticación a un ambiente de estilo rústico chic.

En una pared del dormitorio

Colocar un espejo en el dormitorio siempre es una buena idea. Puedes ponerlos en la pared del cabecero, en la zona del tocador, sobre la cómoda o, como en esta propuesta, optar por un modelo XL apoyado en el suelo junto a la cama, lo que te permitirá verte entera mientras estás eligiendo el look de ese día.

Sobre el mueble bajolavabo

Quizás es una de las fórmulas menos vistas, pero el efecto es espectacular, ya que aporta personalidad y se aleja del típico espejo de baño. Eso sí, necesitas un mueble lo suficientemente grande, para que las proporciones estén equilibradas, y un espejo que o bien se fusione con el resto de elementos, para disimular su tamaño, o bien destaque y cree una 'pared acento'.

Junto a la ventana

Colocados junto a la ventana, los espejos llevarán la luz a todos los rincones de la estancia. Eso sí, según el Feng Shui, en el dormitorio, nunca deben ponerse frente a la ventana, ya que la energía que entra por ella se reflejaría y saldría de nuevo al exterior. El sitio ideal es una pared lateral, como en este ambiente.

En modo Llanero Solitario

Partiendo de que un espejo de cuerpo entero y XL aporta siempre dramatismo y espectacularidad, en esta propuesta tanto sus proporciones como su marco de madera, que destaca sobre la caja blanca de paredes y techos, le dejan solo para que sea la estrella del espacio. Además, resulta muy práctico para revisar el look antes de salir de casa.

En habitaciones pequeñas

En dormitorios pequeños, los espejos XL de cuerpo entero apoyados en el suelo aumentan la sensación de amplitud al instante, desplazando la pared a la que se enfrentan. Si, como en este ambiente. además, lo complementas con otro colgado de estética similar, su efecto será aún mayor.

En un pasillo estrecho

En pasillos estrechos y oscuros, un espejo XL apoyado en el suelo multiplicará la luz debido a su tamaño, proporcionará un toque desenfadado al ambiente y hará las veces de espejo de vestidor, si tu dormitorio es pequeño y no entra un diseño de estas dimensiones. Si quieres que luzca como se merece, no dudes en elegir un modelo especial, como este.

En el vestidor

Es otro de los lugares donde tener un espejo de cuerpo entero apoyado en el suelo te facilita el día a día. Colócalo en un rincón, procurando que haya espacio suficiente delante para que puedas probar (y comprobar) tu outfit. Puedes poner un modelo sin marco, y crear la sensación de tabique, o con uno a juego con el mobiliario, como en esta propuesta.

Integrado en la decoración

En los dormitorios, los espejos de cuerpo entero apoyados en el suelo son uno de los recursos más prácticos para el día a día. Como tienen mucha presencia, debes tener cuidado a la hora de integrarlos, para que no compitan, por ejemplo, con el cabecero. La mejor opción es elegir un diseño del mismo estilo, que juegue con los materiales y colores del ambiente. En esta propuesta, se ha colocado un sencillo modelo de madera, a juego con el suelo y la banqueta descalzadora.

Para realzar la decoración

Los espejos apoyados sobre un mueble no solo suman virtudes prácticas, sino que también elevan el look de la pieza, haciéndola todavía más especial. Esto es lo que ocurre en este ambiente, donde el precioso espejo clásico con marco dorado destaca, pero sin eclipsar a la bella consola sobre la que descansa.