Un nombre que resuena entre la socialité española desde que nació. Hija de Isabel Preysler y Miguel Boyer. Hermana de Tamara Falcó y los hermanos Iglesias. Y mujer del ex tenista español Fernando Verdasco. Pero ahora, Ana Boyer está en boca de todos por su participación y podio en el reality de cocina Bake Off. En él ha demostrado que la repostería también es lo suyo, como ya sabíamos que lo era la moda.

Aunque, como revista especializada en decoración e interiorismo, nuestra atención la ha capturado su nueva casa en Doha. Y en concreto su dormitorio y la original forma con la que ha decorado la pared del cabecero, un rincón que tiende a quedar en el olvido, pero que, una vez decorado, es el auténtico protagonista.

Las formas para añadir personalidad a la pared que franquea la cama y el cabecero son infinitas: con espejos, papel pintado, estanterías a medida, lámparas colgantes, con palillería de madera o con cuadros. Y es esta última idea la que ha conquistado a la abogada y empresaria.

DORMITORIO ANA BOYER

 

ORIGINALIDAD Y NOTAS CLÁSICAS EN EL DORMITORIO DE ANA BOYER

En esta foto que Ana Boyer subió a su perfil de Instagram, podemos ver que, sobre el cabecero de estilo clásico, ha creado un pequeño mosaico con cuadros y obras de arte de distinta forma, tamaño, color y estilo. 

Como no podía ser de otra forma, y a juzgar por esta foto, la sofisticación es algo que no falta en su dormitorio. Algo que refleja la ropa de cama blanca con raya, el cabecero con acabado brillante o los marcos de fotos con ornamentaciones y detalles en dorado. 

Si bien podría haber optado por una obra individual, siempre queda más dinámico y más personal mezclar obras de distinta procedencia y estilo. Por ejemplo, podemos ver un mapa antiguo, un cuadro abstracto, una ilustración o un dibujo que parece hecho a carboncillo. 

CUADROS PARED DORMITORIO

5 CONSEJOS PARA CREAR UN MOSAICO CON CUADROS 

Si te has convencido de que diseñar un collage de cuadros (o cualquier elemento de decoración vertical) es la mejor solución para despedirte de esa pared aburrida que impera en tu dormitorio, antes has de tener en cuenta una serie de aspectos para que la composición sea estilosa y armoniosa. El denominador común puede ser muy diverso - como ahora detallaremos - pero nunca podemos perder de vista la coherencia estilística. 

  1. COLOR: Unificar la paleta cromática de los cuadros o fotografías garantiza la armonía entre ellas. Un claro ejemplo es apostar por el blanco y negro. 
  2. TEMA: Si todas las obras siguen un mismo concepto (paisajes, abstracción, ilustración, retratos…) ayudará a que la composición tenga un sentido y una estética parecida. 
  3. MARCOS: Como es el caso del dormitorio de Ana Boyer, los marcos son el denominador común entre las obras de distinta procedencia. Sobre todo si son gruesos y llamativos, pueden conseguir unificar piezas aparentemente dispares e incombinables. A su vez, escoger marcos distintos para cuadros muy parecidos también puede ser una forma de añadir personalidad. 
  4. TAMAÑO Y PROPORCIÓN: No significa escoger marcos u obras del mismo tamaño, sino de estudiar la composición para que encajen entre ellos. Además, se ha de tener en cuenta el efecto final, si se quiere una composición enmarcada dentro de una forma geométrica, o se prefiere una forma más libre y desordenada. Mezclar diferentes tamaños agrega interés visual. 
  5. EQUILIBRIO VISUAL: Distribuye los cuadros para que queden ordenados, evitando agrupaciones demasiado densas o demasiado separadas. Un truco para ir probando diferentes posiciones es crear el mosaico en el suelo o marcar las posiciones en la pared con cinta de carrocero.