El carácter tranquilo y agradable de los propietarios de este piso de Moscú se refleja perfectamente en los espacios que ha creado la arquitecta e interiorista Ariana Ahmad. Paredes casi blancas, tonos naturales y una cuidada selección de mobiliario de los años 70 y 80 con un toque moderno hacen de hilo conductor de este proyecto.

Si hay un material que destaca especialmente es el roble, tanto en el pavimento, elegido en formato ancho y con nudos para enfatizar su naturalidad, como en las paredes con paneles de chapa de roble a juego, aunque sin nudos.

El dormitorio principal presume de la misma luminosidad y vistas que el salón

El dormitorio principal presume de la misma luminosidad y vistas que el salón.

Foto: © Mikhail Loskutov

En los 170 metros cuadrados, la vivienda presume de numerosas ventanas, especialmente en la zona más social, donde casi no hay paredes y los acristalamientos panorámicos ofrecen unas preciosas vistas de la capital rusa. El conjunto ofrece un interiorismo luminoso y delicado a la medida de esta familia con dos hijos.

El proyecto contempla un espacio común que engloba la cocina abierta al salón y comedor y una acogedora zona privada que incluye un dormitorio principal, un cuarto de baño, un vestidor, un despacho para el marido y uno más pequeño para la mujer. Para los niños, hay dos dormitorios con su baño infantil, además de un aseo de invitados y una zona de lavandería.

Descubre un interiorismo de lujo

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© Mikhail Loskutov

Acceso elegante y acogedor

El acceso al piso, de 170 metros cuadrados, está separado del pasillo por unas puertas correderas y, al final de éste y tras cruzar dos puertas batientes, está el acceso a la zona común del salón, comedor y cocina.

A la derecha, obra de arte de Lev Efimov. Suelo, de Finex.

© Likhail Loskutov

El roble como protagonista

Ya desde la misma entrada a la vivienda se ven los paneles de chapa de roble que protagonizan los diferentes espacios del piso. Están hechos a medida según los bocetos de la arquitecta Ariana Ahmad.

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© Mikhail Loskutov

Comedor escultórico

Los paneles de chapa de roble que presiden la zona principal del piso ya se visualizan antes de acceder a ésta y son los que añaden lujo al diseño interior. Para el comedor se han elegido unas sillas gráficas y una mesa de carácter escultórico para contrastar con las paredes blancas y el acogedor sofá blanco.

Sillas y sillón blanco, de Minotti. Mesa, de Desalto. Iluminación, de Giopato & Coombes.  

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© Mikhail Loskutov

Un salón envolvente

Destaca la composición del gran sofá verde oliva presidiendo una envolvente especialmente marcada por el roble en suelos y paredes, dando como resultado una estancia de rasgos muy naturales y armoniosos. La lámpara de pie pone el toque más artístico a este rincón.

Sofá, de Minotti. Alfombra, de Art de Vivre. Lámpara de pie, de Vinod Lighting. 

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© Mikhail Loskutov

Cocina en tonos naturales

Los azulejos y todas las tonalidades de la cocina son naturales, de forma que la atmósfera armoniosa del salón se prolonga por todo el espacio. Qué duda cabe que la elección de los colores está determinada por una interpretación moderna del tema ecológico.

Cocina, de Modulnova. Taburetes, de Menu.

 

Dormitorio relajante y luminoso
© Mikhail Loskutov

Dormitorio relajante y luminoso

En el dormitorio principal, que también presume de muchas ventanas y mucha luz, se sigue la misma tónica decorativa que en el salón, con colores neutros y sosegados.

Alfombra, de Art de Vivre. Ropa de cama, de Atelier Tati. Cama, de Poltrona Frau. Sillón, de Minotti. Lámpara de pie, de Ferm Living. Decoración, de Moonstores

Un baño a medida
© Mikhail Loskutov

Un baño a medida

Como se decidió inicialmente, los tonos naturales alcanzan también el baño principal, donde los muebles se han hecho a medida, según los bocetos de la arquitecta Ariana Ahmad 

Sanitarios, de Catalano. 

© Mikhail Loskutov

Un despacho que invita a concentrarse

La distribución del piso contempla sendos despachos, para él y para ella. En este, la interiorista se ha permitido la licencia de elegir un color más intenso para su ambientación y que invita a la concentración.

Silla, de Minotti. Alfombra, de Atelier Tati. Sofá, de Bonaldo. Lámpara de pie, de Vibia. Decoración, de Moonstores.

Dormitorio infantil en azul
© Mikhail Loskutov

Dormitorio infantil en azul

Los dos dormitorios infantiles siguen un patrón muy similar, a partir de muebles personalizados diseñados por el arquitecto. También hay otros detalles que se encuentran en ambas estancias, una en tonos más de niño y la otra, de niña, evidentes en los tonos azules y rosas.

Sillón, de Bonaldo. Alfombra, de Art de Vivre. Silla, de Moonk Design. Alfombra, de Art de Vivre.

Muebles infantiles personalizados
© Mikhail Loskutov

Muebles infantiles personalizados

A partir del mismo diseño de mobiliario y distribución se ha hecho el dormitorio de la niña con predominio del color blanco, pero donde se han incluido ciertos detalles en color rosa. Y el papel de la pared junto a la cama se ha elegido en un tono gris claro con rayas muy dulce.

Cama, de Twills. Decoración, de Moonstores. Ropa de cama, de Atelier Tati. 

© Mikhail Loskutov

Baño de los niños atemporal

Aun siendo el baño de los peques de la casa, se ha querido aplicar un diseño más atemporal que se amolde a las diferentes etapas de su crecimiento. De ahí la elección de los acabados. Y los muebles, nuevamente, son un diseño a medida de la arquitecta Ariana Ahmad.