Adiós problemas con tus vecinos por el ruido: la Propiedad Horizontal y otras reglas para que estés a gusto en tu casa

¿Sufres ruidos en casa? ¿La cosa ya resulta estresante? Si los estatutos de tu comunidad son ambiguos al respecto (que no deberían) y estás harto de protestar, las ordenanzas municipales sí recogen los decibelios permitidos tanto de día como de noche. Pero no solo. La Ley de Propiedad Horizontal (LPH), actualizada en enero de 2025, es una norma de referencia. Obviamente, antes denunciar en comisaría o interponer una demanda legal, expresa tu preocupación en la junta de vecinos o habla con tu vecino y exponle qué ruidos puede evitar, como poner la música a todo trapo; que las mascotas anden trotando todo el día (y la noche) o usar la cinta de correr a horas intempestivas. En Interiores nos interesa el tema y en este artículo vas a encontrar información útil a preguntas habituales alrededor del ruido en casa.

¿Cuánto ruido se puede hacer?

Para que te hagas una idea, el ruido de día no debería superar el de una conversación a un tono normal (unos 35 decibelios). Por la noche no debe hacerse ruido entre las 23 horas y las 7 de la mañana. Esa misma conversación debería mantenerse en tono muy bajo, como si estuvieras en una biblioteca (unos 25-30 dB). Si tu vecino va a hacer reformas (se trata de un ruido puntual), debería avisarte y, desde luego, ceñirse a realizarlas exclusivamente en horario diurno.

La Ley de Propiedad Horizontal regula las relaciones entre los propietarios de un edificio

¿Qué dice la ley sobre el ruido en una comunidad de vecinos?

Es el ayuntamiento de tu localidad el que debe aprobar en sus ordenanzas los horarios en los que no se puede hacer ruido y que están pensados, precisamente, para que la gente pueda descansar. Generalmente, entre las 11 de la noche y las 7 de la mañana no debe hacerse ruido. Además, está la Ley de Propiedad Horizontal (LPH), que, básicamente, regula las relaciones entre los propietarios de un edificio y que en el artículo 7.2 ya recoge la prohibición de realizar actividades molestas y cómo debe actuar la comunidad de vecinos. Finalmente, los estatutos de la comunidad de vecinos también deberían recoger cómo comportarse al respecto. En cuanto a obras y ruidos ambientales, un tema que hasta hace poco no ha sido prioritario, la Ley del Ruido de 2003 es la norma estatal reguladora al respecto.

Si tras hablar con tu vecino el ruido persiste, denuncia en el Ayuntamiento y asesórate legalmente sobre qué pasos dar

¿Qué puedo hacer ante vecinos ruidosos?

Aplicando siempre el sentido común (pretender que se hable en susurros desde las 10 de la noche en España se antoja complicado), habla con tu vecino y cuéntale qué ruidos te están molestando y si puede evitarlos (a veces, una conversación revela que el vecino que pensabas que es un insensible, simplemente es despistado y, como les sucede a tantos, piensa que vive solo en la comunidad). Que la cosa no funciona y se sale de madre, tienes otras vías. La primera es acudir al presidente de la comunidad o al administrador para que hable con el vecino ruidoso (como decíamos, el artículo 7.2 de la LPH prevé cómo actuar en estos casos). Que no funciona, es hora de llamar a la Policía. Si el ruido persiste, denuncia en el Ayuntamiento y busca asesoramiento legal para saber qué tipo de acciones puedes tomar. Es importante recabar pruebas, como el testimonio de otros vecinos o mediciones de decibelios que refrenden tu denuncia.