Las paredes con texturas es una de las tendencias de la primavera/verano 2025. Muchos expertos del sector se han sumado a esta corriente, que consiste en dotar de personalidad y tacto a aquellos muros de la casa que, hasta ahora, han estado completamente lisos. Palillería de madera, acabados en mate o revestimientos lacados son algunas de las opciones que están en pleno auge. Sin embargo, existe una alternativa clásica que ha vuelto con fuerza, que destaca por llenar de estilo los hogares y disimular imperfecciones: el gotelé.
En el boom inmobiliario de los años 70, cuando se empezó a llenar las ciudades y el litoral español de edificios, apareció el gotelé. Este acabado se trata de un sistema de pintura espesa que se reparte por las paredes, otorgándoles textura gracias a los grumos concentrados. Esta tendencia tuvo mucho éxito en su época porque daba relieve a los muros lisos y ocultaba aquellos fallos de la estructura.
Medio siglo desde su aparición, este revestimiento ha vuelto a nuestras casas. Así lo explica la interiorista de Simple Domus, Paula Ramiro. "El gotelé vuelve a estar de moda. Es algo que veo después de trabajar en el sector y comprobar el auge de las texturas en paredes" afirma la experta.
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3 ventajas del gotelé, según Paula Ramiro

Foto: Espacio de Sinmas Studio para Hager en Casa Decor 2023
Paula Ramiro encabeza su propio estudio: Simple Domus. La experta cuenta con una amplía trayectoria en el mundo del interiorismo y la decoración, tanto en España como en Reino Unido. A través de sus redes sociales, podemos ver algunos de sus trabajos y las mejores ideas que podemos plasmar en nuestra casa. En una de sus últimas publicaciones, la profesional habla sobre el gotelé y las 3 ventajas de conservarlo en nuestras paredes.
1. Mayor interés visual
"Las texturas añaden interés visual, ya sea con rastrillado o ranurado", comenta Ramiro. Con esta idea, lo que nos quiere decir la interiorista es que las paredes no son solamente extensiones verticales, sino que se puede jugar con los diferentes tactos y relieves para que ganen estilo propio y puedan ser el centro de atención.

Foto: Syra Coffee
2. Disimula los defectos de las paredes
El gotelé es un acabado que tiende al estilo maximalista. Al tener los grumos tan concentrados, los muros no cuentan ni con un solo centímetro liso. "Evitas que se vea cualquier mancha o rascada. La textura, al ser desigual, las esconde", dice Paula de Simple Domus. Por lo tanto, si estás pensando en lijar las paredes y acabar con este revestimiento, asegúrate de que no tengas imperfecciones que puedan quedar a la vista con el cambio.
3. Adiós a las paredes irregulares
Ramiro dice que con el gotelé "disimulas las paredes que no son rectas". La experta comenta que esta finalidad es por la que se creó este acabado en su momento, por lo que no está de más en volver a sus orígenes para ocultar la irregularidad de los muros lisos.
Paredes con texturas modernas y elegantes

Foto: Foto: Montse Garriga - Proyecto: Luzio Studio
Listones de madera
La madera es nuestra mejor aliada en los diseños de interiores. Es resistente, natural y nunca pasa de moda. Para que las paredes tengan carácter, opta por revestirla con listones hechos de este material. Al ser piezas verticales, la extensión de los muros ganan altura visual y un tacto de lo más sobrio.

Foto: Adrián Mora Estudio: Enue + Carmen Yarza
Ladrillo visto
El estilo industrial destaca por tener paredes de ladrillo visto. Es una buena idea para conservar parte del estado original de la estructura del edificio y otorgar un toque más moderno a las paredes. En esta oficina de Valencia, proyecto del estudio Enue + Carmen Yarza, se ha optado por esta estética para una parte del muro del baño.

Foto: ABI Interiors
De arcilla
En esta casa de Australia, diseño de Matt Jamieson y Emma Sweeny de Project X, se ha apostado por revestir las paredes con arcilla. Es un material natural y rugoso que aporta mucha serenidad a un ambiente. La textura es sutil y atemporal.