¿Aún no has caído rendido al poder decorativo de los suelos vinílicos? Después de leer este artículo lo harás y más si estás deseando renovar tu cuarto de baño pero la pereza te invade solo con pensar en las obras que conlleva. ¡Olvídate!
Es posible transformar el baño en poco más de un día y sin ver una partícula de polvo, lo que se traduce en una reforma sin obras. Prepárate para despedirte de esas baldosas de suelo anticuadas que afean el conjunto. Nuevo suelo, nuevo baño.
Fotografía: Estudio Sirëe
Y todo sin que tu bolsillo se resienta. El suelo de vinilo, un suelo plástico de calidad, es perfecto para decorar con un presupuesto low cost. El poder del suelo y de las paredes en la estética final del baño es importantísimo. Con este cambio y nuevos complementos y toallas tendrás lo que ansías: ¡cuarto de baño nuevo y a la moda!
Fotografía: Laura Ashley
Suelo de vinilo: ¡camaleónico!
Sea cual sea tu idea hay un suelo vinílico para tu cuarto de baño. Existen tanto diseños como imagines. Colores, texturas y acabados que imitan madera, mármol, piedra, cerámica, cemento, hormigón e, incluso, el tan de moda hidráulico. La impresión de la capa final de los suelos vinílicos te permite disfrutar del acabado que quieras sin que apenas se note que se trata de una impresión.
Además, han mejorado tanto la calidad de este tipo de suelo (nada tienen que ver con los primeros diseños en plástico que salieron, conocidos como suelos de sintasol) que incorporan incluso textura para que el acabado final sea rugoso e imite certeramente el tacto al pie descalzo de la piedra la madera.
Fotografía: Leroy Merlin
Además, para que la sensación al pisar sea más placentera, muchos diseños de suelos vinílicos incorporan una capa extra de amortiguación en la instalación. ¡A cambiar el suelo sin obras! Y luego solo tendrás que tener en cuenta unos mínimos aspectos de la decoración del baño para que la renovación sea total.
Fotografía: Gabarró
Ventajas y beneficios del suelo vinílico
La principal ventaja es que te permite cambiar el suelo sin obras. La facilidad de su instalación (se coloca sobre el suelo que tengas) y de corte lo hace perfecto para el baño ya que es muy fácil cortar las lamas, baldosas o losetas para adaptarlas a la forma del lavabo, inodoro o bidé, de manera que no hay que quitar los sanitarios para instalarlo.
Si eres manitas, no tendrás problema en hacerlo tú mismo y, si no lo eres tanto, cualquier instalador de parqué te lo colocará sin problema.
Fotografía: Quick Step
Además es higiénico, seguro y fácil de mantener. Los suelos de vinilo soportan la humedad, por eso son perfectos para el cuarto de baño. Se limpian con una fregona escurrida y son antideslizantes.
Fotografía: Leroy Merlin
Gracias a su composición, impiden el crecimiento de hongos y bacterias, son anti ácaros y no producen electricidad estática.
Tipos de instalación de los suelos vinílicos
Losetas, baldosas, lamas o en rollo. Todos se colocan directamente sobre la solera o el suelo antiguo. Lo más importante es que la superficie sobre la que se instala el vinílico esté limpia, seca y bien nivelada.
Fotografía: Gabarró
Losetas y baldosas tienen formas cuadradas y rectangulares, mientras que las lamas son tiras de suelo estrechas, que se instalan en paralelo, en espiga o intercalando las juntas. El rollo es un vinílico continuo que se corta a la medida que se necesite. Losetas, baldosas y lamas también se cortan, generalmente con un cúter, para adaptarlas a las medidas de la habitación y a las formas de los sanitarios en el caso del baño.
Fotografía: Laura Yerpes Estudio de Interiorismo
Existen suelos vinílicos adhesivos y con sistema de clic. Los primeros llevan una tira adhesiva incorporada, se retira la capa protectora del adhesivo y se fija. Es posible añadir una imprimación acelerante al suelo, de venta en superficies dedicadas al bricolaje, antes de colocar el vinílico para darle más consistencia.
Los segundos se instalan encajando las piezas entre ellas en un sistema de ranuras macho/hembra que hacen clic para unirse. ¡Sencillísimo! Si optas por vinílicos en rollo, la instalación es con una cola específica o cinta de doble cara.
Durabilidad y resistencia de los suelos vinílicos
Lo más habitual es que el suelo de vinilo se componga de capas. La capa inferior o soporte es una capa de vinilo, fibra de vidrio o fieltro y a continuación se disponen las siguientes capas: de relleno (generalmente de PVC), la capa decorativa que da el acabado al suelo y una final protectora de vinilo transparente.
Fotografía: Quick Step
Esta última capa superior del suelo vinílico es la que condiciona su duración y resistencia a pisadas y a roces así como a los rayos UV. Tenlo en cuenta si el suelo de tu baño recibe luz natural directa. Elige su resistencia en función del uso que vayas a hacer del baño, desde moderado (con una capa superior de 0,07 a 0,2 mm) a intenso o muy intenso (desde 0,2 a 0,5 mm).
Fotograría: Hübsch Interior
Es importante tener en cuenta también el grosor total de la lama, baldosa o loseta ya que aporta robustez al suelo y un mejor comportamiento acústico a la pisada.
¿Tienes más preguntas antes de reformar el baño? Te las resolvemos aquí.