El pavimento desempeña un papel crucial en cualquier hogar, no solo por su impacto visual, sino también por su capacidad para influir en la funcionalidad de cada espacio. Al elegirlo, es imprescindible considerar el uso que se le va a dar a cada área, su resistencia, la facilidad de mantenimiento y, en zonas más expuestas a la humedad, como cocinas y baños, su capacidad de impermeabilidad. Y aunque en muchas ocasiones se tiende a infravalorarlo, no hay que olvidar que se trata de un elemento transformador capaz de redefinir el alma de un espacio, dando forma a su carácter y generando una atmósfera única.

En efecto, más allá de los socorridos suelos de madera –parqué y laminados–, hay otras opciones que ofrecen esa misma sensación de confort y calidez, siendo muy versátiles y duraderas. Si estás pensando en instalar uno nuevo, te damos las claves para hacer la elección perfecta.

Camaleónico y polifacético

Las antiguas baldosas de gres, sensibles a la humedad y con un grosor y peso que dificultaban su instalación, han quedado atrás. Su resistencia limitada y la escasa variedad de acabados han sido superadas por los porcelánicos o porcelanatos. Hechos de cerámica prensada, estos pavimentos tienen una porosidad casi nula, lo que les confiere una resistencia excepcional a impactos, temperaturas extremas y humedad. Por esta razón, son ideales para zonas de alto tránsito, exteriores, baños y cocinas.

Comedor con toques verdes

Micra-R Blanco y Micra-R Siena (60 x 60 cm; unos 43€/m2) son
dos porcelánicos rectificados y con efecto terrazo, de Vives.

Foto: Vives

Además, se instalan con mayor facilidad al adherirse bien al cemento u otras soluciones de enganche, y tienen la capacidad de replicar una amplia variedad de diseños y materiales, como la madera o las piedras naturales. Incluso, pueden presentar efectos metalizados, uno de los acabados más populares esta temporada. Disponibles en un vasto rango de medidas, los porcelánicos de gran formato –cuyas piezas superan los 80 centímetros de medida y alcanzan hasta los 3 metros– se han convertido en una opción cada vez más solicitada, ya que ofrecen una sensación de continuidad que expande visualmente los espacios.

Lo mismo ocurre, precisamente, con las baldosas rectificadas: aunque su instalación puede ser algo más compleja que la de las biseladas, debido a que sus bordes han sido cortados a 90º tras su cocción, dan como resultado una superficie donde las juntas se vuelven casi invisibles, creando una apariencia sumamente uniforme en los paños.

Naturaleza reinventada

Salón con chimenea

Multiformato XL Horus Beige Home (de 30,5 x 30,5 cm a 61 x 91,4 cm; CPV), en piedra caliza natural. De L’Antic Colonial.

Foto: L'Antic Colonial

La piedra natural ha sido empleada en la construcción desde tiempos inmemoriales, destacando especialmente en suelos por su incuestionable durabilidad e innata belleza. La caliza y el travertino, en tonalidades neutras, acabados satinados mate y formatos de gran tamaño, como los de 120 x 120 cm, atraviesan un momento de gran aceptación. También la caliza, por su versatilidad en estilos y acabados, que van desde superficies lisas y pulidas hasta texturas más rugosas y asimétricas.

Ahora bien, tanto estas opciones como las otras más comunes en el mercado —mármol, pizarra, arenisca y granito— comparten un doble denominador común: la capacidad de aportar un plus de distinción a cualquier ambiente y su adaptación a distintos estilos decorativos. Por algo son una
inversión para toda la vida y a prueba de modas. Del mismo modo que los porcelánicos representan una evolución del antiguo gres, podría decirse algo similar de las superficies compactas sinterizadas.

Recibidor elegante

El granito Imperial Mist (tabla de 300 x 200 cm y solería de 60 x 40 cm; CPV), pertenece a la serie Cénit, de Mármoles Sol.
Se ofrece en dos acabados: Espejo, con un pulido de alto brillo,y Satinado Velvet, de textura aterciopelada mate.

Foto: Mármoles Sol

Eso sí, aunque a menudo se las denomine piedras sinterizadas, no son piedras en el sentido estricto. Este material de última generación se crea a partir de elementos naturales como polvo de piedra, minerales y pigmentos, que se fusionan a altísimas temperaturas y se compactan bajo presiones extremas, dando lugar a un producto ligero y de extraordinaria resistencia. Por ese motivo,
su uso ha trascendido las encimeras de cocina para consolidarse también en los suelos, mobiliario, etc.

Entre sus atributos destacan su porosidad prácticamente nula, que las hace impermeables y resistentes a bacterias y microorganismos, y su capacidad para soportar impactos, rayados y altas temperaturas sin alterarse lo más mínimo. Aun en formatos XXL sin juntas visibles, pueden fabricarse con espesores mínimos de apenas unos milímetros. Y en cuanto a diseños y acabados, nada tienen que envidiar a los porcelánicos: con o sin textura, son capaces de emular con precisión materiales como las piedras naturales o el microcemento. Un abanico de opciones difícil de igualar.

Encanto geométrico

Las baldosas hidráulicas, ya sean de cemento (con 2,5 cm y medidas estándar de 20 x 20 cm), gres
porcelánico (resistente a las manchas y compatible con sistemas de calefacción por suelo radiante) o
cerámica (más frágiles y, por tanto, económicas que las anteriores), se actualizan con nuevos y
rompedores diseños.

Baño con mosaico

Un trabajo de Project Home con el hidráulico de cemento Diamond UNI (35 x 20,2 cm; unos 86€/m2). De Mosaic Factory.

Foto: Mosaic Factory


El suelo damero vuelve con fuerza, renovado, con combinaciones atrevidas de colores vibrantes que
superan el tradicional blanco y negro. De hecho, una de sus variantes más recientes ha derivado en
las rayas bicolores, una opción muy en boga.
• Los patrones clásicos y retro también se reconfiguran en audaces cromatismos, mientras que las baldosas tipo cenefa se consolidan como una solución útil para enmarcar o definir espacios dentro
de ambientes abiertos.

Ayer y hoy

Baño mosaico

La original colección Carton (60 x 60 cm; CPV), de Cerámicas Aparici, celebra lo imperfecto y la filosofía Wabi-sabi.

Foto: Cerámicas Aparici

Los azulejos hidráulicos, un vestigio del pasado que se va actualizando con diseños y patrones que desafían lo clásico, honrando lo mejor de la artesanía, han encontrado una nueva funcionalidad en
tiempos recientes: en ambientes diáfanos, como en los que la cocina convive con el salón comedor dentro, pueden usarse como elemento zonificador.

Mención aparte merecen otras dos propuestas que, por su naturaleza, proyectan al futuro en vez de hacia tiempos pretéritos. Por un lado, están los suelos vinílicos, una opción cada vez más en
boga por su versatilidad. Y por otro, el microcemento, ideal para quienes buscan vestir su hogar con una pátina industrial. De acabado liso y continuo, lo que evita posibles filtraciones, puede aplicarse sobre cualquier suelo ya instalado –a excepción de los de madera, ya que no son lo suficientemente rígidos– y rinde de forma excepcional en zonas húmedas o de alto tránsito. ¿Sólo es de color gris? Para nada: disponible en una amplísima variedad de tonalidades y texturas, es mucho más personalizable de lo que parece a simple vista.

 

Versatilidad y rendimiento

Dormitorio gris

LVT rígido con subcapa acústica que reduce el ruido en 21 dB. Así es Virtuo 30 Rigid Acoustic 1475 Acuarela Ink, de Gerflor.

Foto: Gerflor

El suelo vinílico combina diseño, resistencia y versatilidad, gracias a su núcleo de PVC puro (LVT) o en opciones que mezclan este polímero con virutas o serrín de madera (WPC) o polvo de piedra (SPC). Su superficie, recubierta con tejidos o papel decorativo que reproducen con precisión materiales como la madera, el cemento o la piedra natural, entre otros, está protegida por una capa de PVC tratada con poliuretano, lo que refuerza su resistencia a arañazos, manchas y bacterias.

Fácil de instalar mediante sistemas de clic o adhesivo, destaca por ser completamente impermeable y antideslizante, características que lo convierten en un aliado fabuloso para cocinas y baños, espacios que requieren materiales de alto rendimiento. De igual modo, su capacidad para absorber impactos sin deformarse y su mantenimiento mínimo –basta con una mopa húmeda y productos básicos de limpieza– lo afianzan como una elección estupenda para quienes buscan la máxima funcionalidad sin renunciar a la estética, ofreciendo un balance perfecto entre utilidad y estilo.

4 espacios con pavimentos modernos