Si tienes 60 años o más (o un poco menos) seguro que recuerdas este mueble con puertas de cristal donde tu madre guardaba la vajilla de las ‘fiestas’ y esos objetos decorativos ‘buenos’ o delicados que debían estar protegidos de la suciedad y de los niños.
Como la decoración es cíclica, lasvitrinas vuelven a las casas actuales, quitándose el polvo del encima, pero sin perder todo su encanto. Si eres una nostálgica y tienes buen ojo para la decoración, seguro que ya la tienes, pero si aún no, esta de Zara Home es la mejor opción para que reine el orden de forma estilosa. Además, tenemos otra opción por si no terminas de estar convencida…
Así es el mítico mueble de Zara Home
Bonita y ponible en cualquier estancia de la casa, desde el baño hasta el comedor o el dormitorio. Pese a estar realizada en madera de acacia, resulta ligera, ya que su parte inferior está abierta, lo que crea sensación de altura y estiliza su estructura (70 x 160 cm).
Con puertas abatibles con detalle de vidrio estriado, tiene cuatro baldas en su interior, ideal para colocar todas aquellas cosas que quieras enseñar o localizar a la primera.
Su precio es de 599 € (Ref. 7566/077).
IKEA también tiene una versión en blanco
Hecha de madera maciza de pino de bosques sostenibles, Hemnes se puede usar sola o combinada con otras piezas de la serie, como la estantería de la foto. Su disposición con cajones grandes permite tener lo que no quieres tener a la vista, como papeles, a resguardo del polvo. Mientras que el pequeño resulta ideal para cubiertos o para todas esas cosas que nunca sabes dónde colocar.
Además, sus baldas, que aguantan hasta 30 kilos, son regulables para que puedas adaptarla a tus necesidades, al igual que sus patas, lo que hace que se mantenga estable incluso en suelos desnivelados.
Disponible también en rojo y en negro, mide 90 x 197 cm y su precio es de 399 € (Ref. 505.306.34).
Una vuelta anunciada
Aunque estuvieron un tiempo fuera del circuito decorativo y parecía que sus años de gloria habían pasado, lo cierto es que hay que celebrar su vuelta porque no solon ayudan a mantener el orden con estilo, sino que además aportan belleza y una nota de autenticidad y encanto, que ayudan a crear hogar. Su recuerdo evoca a la casa de madres o abuelas, a comidas familiares, a fiesta en las que se ponía la vajilla buena… En definita, a momentos felices. Por eso, aunque solo sea por eso, merece hueco en nuestras casas.
Qué guardar
Vajillas, colecciones de objetos, libros... Todo aquello que quieres que se vea y proteger del polvo, al mismo tiempo. También son un buen lugar para las cosas delicadas, que puedan romperse fácilmente.
Pueden brillar en solitario o lucir en pareja con otro clásico (y básico) del orden: el aparador. Todo depende del espacio disponible y de lo que quieras guardar.
Dónde ubicarla
Aunque el comedor y la cocina (imposible no pensar en esas grandes cocinas rústicas o provenzales) son su hábitat natural dentro de casa, lo cierto es que pueden pasearse por el resto de estancias sin problemas de adaptación. De esta manera, es un buen aliado para mantener el orden en baños, áreas de lavado, dormitorios o bibliotecas.
Además, como están disponibles en distintas estéticas, desde las más tradicionales en madera hasta las más contemporáneas en metal, lo que le permite integrarse también en cualquier estilo decorativo.