Amores de verano DECO: las ideas decorativas que nos hemos traído de nuestros viajes veraniegos

En vacaciones lo que está mandado es disfrutar, eso sí, si a la vez que desconectas de la rutina diaria y del estrés eres capaz de inspirarte para decorar tu casa, ¿qué más se puede pedir?

Desde Grecia hasta Mallorca, pasando por México. Te traemos una selección de algunos de nuestros flechazos deco este verano

Amores de verano DECO: las ideas decorativas que nos hemos traído de nuestros viajes veraniegos
Amores de verano DECO: las ideas decorativas que nos hemos traído de nuestros viajes veraniegos

Flechazo. Fugaz. Intenso. Pasional. Pasajero… Si te pedimos que describas qué es para ti un amor de verano, seguramente alguna de estas palabras salga de tu boca. Algo así como las Summer nights que vivieron John Travolta y Olivia Newton-John -qué pena su pérdida- en Grease… ya sabes como sonaba eso de Summer lovin', had me a blast. Summer lovin', happened so fast. I met a girl crazy for me. Met a boy cute as can be. Summer days driftin' away. To uh, oh those summer nights…

Pero si lo piensas bien, Danny y Sandy siguieron juntos más allá de los meses en los que el sol brilla, la piel está bronceada y el olor a antimosquitos te acompaña. Sí, ellos son la prueba de que pese a su fama de temporales y discontinuos, los amores de verano pueden ser algo más que un capítulo. Pueden llegar a ser libro o por lo menos un artículo. 

En eso por lo menos voy a convertir yo los que he vivido este año. Y aunque tienen pinta de que se quedarán en mi psique un tiempo largo, prefiero dejarlos por escrito, no vaya a ser que algún día se me ocurra olvidarlos. Son cinco, acontecidos en cinco lugares diferentes: Grecia, Mallorca, Italia, México y Madrid. ¿Demasiados?

Dicen que en verano estamos más predispuestos a los romances. Al estar más relajados tenemos una actitud más receptiva a lo nuevo, a la atracción, a lo que sale de nuestra rutina. Eso explicaría por qué la decoración de estos hoteles, restaurantes, tiendas o bares me ha robado el corazón en mis vacaciones de verano y no dejo de pensar en cuánto la quiero en mi hogar el resto del año. Descubre las mejores ideas decorativas traidas de todo el mundo. 

 

Rendirse a Atenas
Hall de The Lekka Hotel & Spa en Atenas

 

Rendirse a Atenas

Mi primera visita a la capital griega no decepcionó. Tras hacer una larga investigación por Google e Instagram para buscar el mejor sitio en el que dormir, el común denominador de los blogs de viajes decía que Plaka es el barrio to be. Lo es por ser el preferido por turistas para alojarse en Atenas, pero es que además es una de las zonas con más encanto y más auténticas -con todo lo que significan estas dos palabras- de la ciudad.

Elegido el barrio. Tocaba el hotel y di con The Lekka Hotel & Spa por casualidad. ¿Por qué lo elegí? Por sus fotos en Instagram no será. A penas tiene cuatro imágenes que no le hacen justicia, de verdad. Digamos que lo mío con este lugar fue un pálpito, pura intuición. “Es aquí, sé que me gustará”, pensé. ¿Acaso no es eso amor? No me equivoqué. Aunque mi llegada fue de noche, y aún así: rendicón. 

 

 

La primera impresión me llegó de un porche de altísimas paredes de hormigón y cinco o seis mesas bajas de madera, cada una con sus respectivas sillas también en madera en este caso de suar y fabricadas de manera artesanal con una original forma de mano. Bien. Una vez en el hall, todo en tonos neutros. Marrones, grises y algún que otro elemento en tonos pastel como las alfombras en azul cielo o el sofá en tonos maquillaje. Echo un vistazo y pienso que aquí todo es cálido y, lo mejor, apto para ser copiado en casa. Lo son, las delicadas lámparas en lamé dorado que caen del techo. Lo es también la mesa de mármol blanco, tallada en una única pieza y perfecta para presidir cualquier comedor -ojalá el mío, por favor-. La guinda, está en las paredes. Elegir los cuadros de Peggy Kuiper nunca puede ser sinónimo de error.

 

Aires relajados en la fortaleza en Cap Rocat, Mallorca
Terraza del hotel Cap Rocat en Mallorca

 

Aires relajados en la fortaleza en Cap Rocat, Mallorca

Por cierto, que en esto de elegir un material natural para las paredes no son los únicos que apuestan y aciertan. Un rollo totalmente distinto -en cuanto a decoración y tipo de plan- es el que se lleva en el Hotel Cap Rocat en Mallorca. El suyo es un edificio declarado Bien de Interés Cultural y catalogado como Monumento Nacional. Además, se encuentra dentro de un Área Natural protegida y se funde totalmente con el paisaje.

Con esta carta de presentación ya te puedes imaginar que la experiencia no va a ser nada normal. Claro, aquí hacía falta salvaguardar la herencia arquitectónica de esta antigua fortaleza. Preservar las formas históricas con el mobiliario más contemporáneo. En Cap Rocat es imposible guardar el móvil, todo es susceptible de ser fotografiado. Las imponentes vistas desde la terraza que se ha integrado en la propia roca hasta, el rincón del que no querrás salir jamás: el spa y su piscina interior. Son todo lo que está bien. La piedra es suficientemente bella como para ser protagonista. El triunfo de la sencillez. Un detalle más, en las habitaciones, reinan las telas estampadas con la típica llengua mallorquina, el ikat que se impone dentro y fuera de la isla.

 

Seletti
Plato de la colección Hybrid de Seletti

 

Una vajilla para comer la mejor pasta italiana

Un párrafo en este artículo no sería suficiente para hacer justicia a mi visita a Italia, pero necesito avanzar por lo menos unas líneas para hablar de mi crush con los platos y bowls que me pedían a gritos desde su lugar en la vitrina de la tienda de Seletti en Corso Garibaldi 117 en Milán venirse conmigo a España.

Me refiero, por supuesto, a Hybrid. Cada plato está elaborado en porcelana china y lo crean uniendo trozos que simulan vajillas del pasado. La colección, además de ser un must para tu mesa -o simplemente para decorar tu vitrina-, es un guiño a la fusión cultural, ya que refleja la producción histórica de cerámica occidental y oriental. Las decoraciones híbridas se inspiran en el pasado, pero han evolucionado hasta formas contemporáneas.

Por cierto, si no sabes cómo enfrentarte a la tarea de decorar tus mesas con más encanto, te recordamos algunos tips para empezar.

 

 

Desde México, con color
Hotel Cuimala en México

 

Desde México, con color

En la época de las apps de ligoteo y del amor 2.0, los flechazos virtuales también entran en la ecuación. El mio con Cuixmala se queda en eso, en un romance de pantalla. Este colorido hotel está situado en el corazón de la Reserva de la Biosfera Chamela-Cuixmala, está en el estado de Jalisco que es, por cierto, igual de colorido. No podía ser de otra forma. Al igual que ocurre con Cap Rocat, este lugar no es de nueva creación, es una adaptación. Cuixmala fue en primer lugar una casa privada.

El muy afortunado -y muy millonario- empresario británico, Sir James Goldsmith decidió instalar aquí su hogar, dicen, al enamorarse -el amor nos atrapa a todos- del impactante entorno natural. Le encargó al arquitecto francés Robert Couturier la ideación y construcción de su palacete. Decorativamente, Cuixmala tiene inspiración arabesca aunque mantiene la esencia de México en la elección de sus colores y de algunos tejidos. Y precisamente con esa osadía de pintar una pared naranja y colocar una puerta azul o hacer una habitación com-ple-ta-men-te blanca, pero elegir un llamativo estampado para la cama nos quedamos.

 

Una tarde clásica en Thompson, Madrid
Thompson Hotel en Madrid

 

Una tarde clásica en Thompson, Madrid

Septiembre empezaba con unos días en Madrid y eso siempre es señal de cosas buenas y bonitas. Si consigues visitar el esperado Thompson Madrid, la primera propiedad de la marca Thompson Hotels en España. La cosa difícilmente puede mejorar. La referencia decorativa está en su homónimo situado en el SoHo de Nueva York. De él ha heredado esa estética de mediados de siglo XX, pero sin poner en jaque a la comodidad. ¿Qué nos llevamos de estar solo unas horas entre sus paredes? Pues precisamente eso, el papel pintado que decora sus muros. Los motivos florales son los protagonistas, eso sí, en combinaciones de colores que no son tan propias de la naturaleza. El morado, por ejemplo, se fusiona con un fondo en tonos salmón. No encontrarás eso en ningún bosque, pero la combinación funciona y debería estar en tu salón.

Y cuando no hay papel, la pared va cubierta con un gran mueble de madera. Imponente es difícil robarle el protagonismo. Lo consigue solo una butaca en azul klein que también deseo o un sofá en capitoné verde y cojines en gris. Mención especial para las bañeras exentas del baño. Si estás renovando el tuyo puedes plantearte el cambio, es un lujo.

 

 

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