Más allá de un sueño, se ha convertido en una realidad. Las piscinas de arena son la nueva tendencia para los jardines de este verano que despejan las dudas a quienes se plantean constantemente sus preferencias: ¿playa o piscina? Con esta alternativa puedes tener ambas en una y, así, disfrutar el doble. Es una propuesta que nos acerca a la playa, sin estar en una, y nos aporta la relajación, la calma y la tranquilidad de estar tumbadas en la arena.
¿Qué es una piscina de arena?
Es un nombre que os podría resultar confuso, pero es una piscina normal y corriente. La diferencia está en la decoración de su alrededor, ya que no hay césped o madera. En su lugar, se utiliza arena o materiales blancos o beige para conseguir crear la sensación de estar en la playa. Destaca por la suavidad que aporta y por ser una construcción de tendencia. ¡Podrás disfrutar de la playa, sin salir de casa y en tu propio jardín!
Pasos para recrear una playa en casa
Las piscinas de arena se adaptan muy fácilmente a cualquier espacio y lugar, gracias a los diferentes tamaños entres los cuales se puede escoger en función de las preferencias que se tengan. Además, se caracterizan por su naturalidad y originalidad. Si tú también buscas algo diferente y quieres disfrutar de la playa y de la piscina, al mismo tiempo, aquí tienes algunos consejos para conseguir recrearlo y tener una playa en casa.
Juega con la vegetación: las plantas, los árboles y las flores te proporcionarán la sensación de estar en el trópico, sin moverte de casa.
El mobiliario decorativo: para mantener la estética natural y no cortar la esencia del lugar, utiliza tumbonas, pérgolas y mesas que se adapten a las tonalidades y dimensiones del lugar.
La iluminación: las piscinas de arena también requieren de una buena iluminación y, sobre todo, que sea bonita y mantenga la elegancia del espacio. Asimismo, deberás tener muy en cuenta la distribución de las fuentes de luz para crear una perfecta armonía en el lugar. Las piedras con luz resultan muy atractivas.
El precio: no te asustes con los costes económicos. Es una opción más cara, pero merece la pena si quieres disfrutar y relajarte en un ambiente como este.
El tiempo de construcción: es una obra que requiere más trabajo que una piscina normal. Aumentará el número de horas que los especialistas trabajarán y también la duración.
Fácil acceso: uno de los grandes beneficios de las piscinas de aren es que permiten acceder fácilmente al agua, sin necesidad de bajar ningunas escaleras.