La llegada del calor es el pistoletazo de salida del verano, una estación que, para muchos, es el sinónimo de uno de los momentos más esperados del año: las vacaciones.
Bien sea para pasar más tiempo en familia, desconectar del trabajo, visitar nuevos lugares... Lo que más nos gusta es aprovechar esos días libres para cambiar de aires.
Y si optas por este plan, además de revisar que las ruedas de tu maleta sigan en su sitio, hay algo que tendrás que mirar sí o sí: dónde vas a dormir.
Se trata de una decisión importante y no es para menos; un buen o mal alojamiento puede mejorar tu estancia o “fastidiarla” por completo.
Si quieres disfrutar por completo de estas vacaciones, tienes, por suerte, un gran aliado que quizás no conocías: el Feng Shui.
Se trata de una ciencia que estudia nuestro entorno para que todo lo que haya en él, como muebles, cuadros, alfombras, plantas, colores y materiales; bien combinados y en la ubicación correcta, generen una energía positiva y un ambiente de tranquilidad y paz.
¿Qué es lo que, según el Feng Shui, necesitas llevar a tu nuevo destino de vacaciones?