Generar mucho con muy poco es lo que define el concepto de eficiencia. En casa, si queremos disfrutar de confort y comodidad sin que se nos dispare la factura de la luz, resulta indispensable aplicar trucos básicos de eficiencia energética. Y, muy especialmente, en épocas de temperaturas extremas como pueden ser las olas de frío en invierno o las de calor en verano.
Cuando la temperatura exterior se dispara y es anormalmente alta durante varios días o semanas como estamos viviendo estos días, el calor entra en casa y puede hacernos la vida imposible, especialmente durante la noche, si no nos deja descansar. Recurrir al uso del aire acondicionado es una opción válida, siempre que se utilice adecuadamente, pero no es la única ni es la más eficiente. Así que vale la pena tener en cuenta unos cuantos trucos fáciles para conseguir la máxima frescura en casa con el mínimo gasto energético.