Es cierto que el dormitorio, atendiendo a su concepto, lo utilizamos principalmente en el momento de irnos a la cama, habitualmente de noche y esto, en verano, representa las mejores horas del día en cuanto a las temperaturas se refiere. Pero, incluso, podemos llegar a mejorar la atmósfera si atendemos a una serie de trucos que debemos aplicar durante el día o algunos otros que implican cambiar hábitos o instalar nuevos elementos.
Porque aunque parezca mentira, todo suma si de refrescar el dormitorio se trata y el cuerpo bien lo agradece en verano. Unas sábanas de algodón (mejor blancas!), las ventanas cerradas cuando incide el sol, iluminación de leds, ventilador en el techo, desenchufar los dispositivos electrónicos…
Y muchos de estos trucos prácticos los puedes aplicar al resto de la casa. ¿A qué esperas a leer los siete que aquí te proponemos y tomar buena nota de ellos?
11 trucos para refrescar el dormitorio este verano