Poco a poco se ha introducido el frío en nuestros días. Aunque este año lo está realizando de forma progresiva, ya es hora de sacar los abrigos, de volver a encender la calefacción y, en tan solo unos días, cambiaremos al horario de invierno. Un horario en el que no solo adelantaremos una hora las agujas de nuestros relojes, sino que nos hará perder una hora de luz y de vida.
Un cambio que incide directamente en nuestro estado de ánimo, pero en el que nuestra casa puede ser el aliado perfecto para minimizar este efecto. Un proceso en el que además de la entrada de invierno podemos abrirnos a nuevas posibilidades y retos, dentro y fuera de casa.
Adaptarse al cambio de horario y al frío del invierno con positividad es clave para enfrentar los próximos meses. Amaia Elías, interiorista y experta en decoración emocional nos da las claves para que la llegada de la nueva estación no nos afecte anímicamente: “Nuestra casa puede hacernos vivir diferentes sensaciones y puede ayudarnos a aplicar mejores hábitos”.
Descubre, a través de 4 consejos, cómo nuestra casa puede ayudar a adaptarnos al cambio de horario con fuerza y positividad.
