Santiago de Compostela esconde un boutique hotel muy especial, A Quinta da Auga Relais & Châteaux es de aquellos lugares que una vez has descubierto no hay marcha atrás: es necesario volver al menos una vez al año para respirar aire puro y rodearse de paredes con mucha historia y contemplar las piezas de arte y detalles que inundan cada uno de sus rincones. Un antigua fábrica de papel, que después de pasas por varias manos cayó en las de Luisa y su hija, Luisa, quiénes decidieron poner en marcha un proyecto muy personal y único: un boutique hotel que se convirtiera en la casa de quién decidiera ir a descubrirlo.
"Yo soy arquitecta, tenía mi estudio y me iba muy bien. A Quinta da Auga fue realmente un regalo del destino, una casualidad que surgió y que después de mucho pensarlo, decidimos que teníamos que hacer de la propiedad un boutique hotel. Todo un reto que he tenido la suerte de llevar a cabo con mi hija: yo soy la creativa de la relación y ella es la organizada y al mismo tiempo la creativa, somos un magnífico equipo- así con mi marido, José Ramón Lorenzo", nos cuenta María Luisa García, co-propietaria y arquitecta del hotel.
El río Sar, el gran protagonista
El hotel se encuentra ubicado en un enclave único con el río Sar como protagonista, el cuál se percibe desde todos los puntos del hotel, ya sea por los ojos o por los oídos. A Quinta da Auga es un verdadero oasis donde el compromiso por la sostenibilidad y el respeto por la naturaleza es una realidad y se percibe en todos los aspectos. "Tener el río Sar literalmente al lado es un auténtico placer. A partir de él vimos la necesidad de mantener al máximo toda la biodiversidad que se encuentra en el recinto, e incluso ir mucho más allá, trabajar para potenciar al máximo lo que nos rodea y mostrarlo a nuestros huéspedes. Somos realmente pioneros de la ecohotelería", explica Luisa Lorenzo, co-propietaria del hotel. Por ello, están realizando un trabajo exhaustivo con profesionales para analizar las plantas que rodean el hotel y ofrecer talleres para mostrarlos al público.
Sostenibilidad también en el interior
"Hemos apostado por usar la técnica de microgeneración en el suelo, cosa que supone que nuestro suelo aprovecha la tempreratura de la tierra y se mantiene siempre en una temperatura constante así evitamos tener que poner aires, calefacción.... Somos pioneros en ello", nos cuenta María Luisa García. "Una apuesta que ha traído sus consecuencias, por así decirlo, porque para evitar perder la temperatura hemos tenido que reforzar las ventanas, ¿cómo? apostando por un marco de madera de castaño", sigue contando.
El comedor social, un gran salón con detalles muy británicos
"El objetivo del comedor social era hacer un lugar de acogida, conseguir que cada huésped se sienta como si estuviera en el salón de su casa", dice Luisa Lorenzo. "Colocamos un mix de mucho: sillones de diferentes tamaños, colores y estampados; mesas de madera de diferentes formas y medidas; cuadros, libros, velas, esculturas... Un combo de mucho pero que encuentra la armonía y equilibrio", explica María Luisa García. Un lugar que nunca está terminado del todo, siempre hay espacio para agregar una pieza más -o quitar-. Ahora bien, el papel pintado de rallas con el granate como protagonista, así como su presencia en muchos sillones y sofás hacen que el estilo británico resalte en todo rincón.
51 habitaciones totalmente diferentes
El hotel está formado por 51 dormitorios y suites, cada uno con sus particularidades y diferencias. Y tanto es así, que cada uno es totalmente diferente. ¿El motivo? "Qué aburrido si todas fueran iguales, nos gusta crear, dejar suelta la imaginación y por ello decidimos que cada habitación tenía que ser diferente. Qué bien nos lo pasamos diseñando cada una", recuerda Luisa Lorenzo. Una con el color azul como protagonista, la otra el lila, la otra el rojo, el verde y mucho más. Ahora bien, cada una ha sido pensada con todo lujo de detalles para ser el lugar donde vivir una experiencia muy confotable, tranquila pero repleta de diseño.
"Los materiales usados para decorar cada dormitorio es de excelentísima calidad, y muchos son sacados de anticuários. Nos recurrimos tantísimos y en todos ibámos comprando cositas. Al final, teníamos un almacén entero repleto de objetos que teníamos que distribuir en cada una de las habitaciones", nos cuenta María Luisa García. Ahora bien, el papel vinílico es un must que se encuentra en cada uno de los domitorios, así como unas majestuosas cortinas totalmente impermeables y de excelente calidad.
Filigrana, el restaurante donde vivir una experiencia gastronómica única
"En la planta baja, a mano derecha se encuentra nuestro restaurante, Filigrana, el lugar donde además servimos los desayunos. Es un lugar pensado para disfrtuar de propuestas elaboradas con productos de proximidad, la mayoría de productores locales de la zona. Y todo servido con una gran amabilidad para que todo el mundo se sienta a gusto", nos explica Luisa Lorenzo. Federico López Arcay es el chef que se encarga de diseñar platos excepcionales y lo hace con procesos de autoabastecimiento gracias a sus dos huertos -uno de hortalizas y otro de cítricos y fresas. Una cocina de alma muy gallega pero actualizada con grandes dosis de técnica, creatividad y honestidad.
El spa, el lugar donde conseguir desconectar de todo
"Para conseguir desconectar de todo y conectar con uno mismo, decidimos incorporar un spa. Un lugar sentirse a gusto y poder cuidarse tanto por dentro como por fuera", dice Luisa Lorenzo. Un lugar diseñado para relajarse que cuenta con tratamientos de hidroterapia y terapis manuales personalizadas para todo tipo de necesidades. Además, dispone de un circuito spa y spa privado con las mejores instalaciones de hidroterapia.
La piscina, un lugar inspirado en el estilo italiano
"Una de las últimas incorporacoines del hotel ha sido la zona de la piscina, muy demandada y totalmete necesaria. Se trata de un lugar donde los huéspedes, más que ir a bañarse van a leer tranquilamente y disfrutar de las vistas" dice María Lorenzo. "Creo que es un lugar que podemos calificar como muy italiano, o al menos de inspiración italiana con el color ojo y las rayas como protagonistas", dice María Luisa García entre risas. Una zona al aire libre con una muy bien resuelta piscina, sillones de madera y coloridas flores.
A Quinta da Auga es el lugar donde ir a vivir una experiencia tranquila, rodeada de naturaleza pero con el gran humor de sus creadoras. Un espacio que siempre se mantiene pero evoluciona, y necesita de una visita anual -como mínimo- para recargar energías. Un lugar que, además, se convierte en el espacio perfecto para celebrar todo tipo de eventos, desde bodas, aniversarios y más. ¿Aún no has decidido las fechas para ir?
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