En 1995 se fundó en Londres el Soho House, un club de socios pensado para la industria creativa que, en algunos casos, cuenta con hotel abierto al público. Así ocurrre en el de Berlín, homónimo y gemelo en cuanto a estilo decorativo del de Barcelona. Los dos comparten un aire vintage diferente a sus hermanos mayores.
Soho House es un club de socios y hotel que se despliega por las ocho plantas de un edificio de la Bauhaus totalmente restaurado. Originalmente abierto en 1928 como grandes almacenes, el imponente bloque ha pasado por todos los avatares de la historia reciente de Alemania. Desde los nazis a los comunistas. Tras la reunificación se devolvió a sus propietarios originales que lo tuvieron abandonado hasta que fue recuperado por Soho House en 2010. Ahora estrena apartamentos y lofts de lujo únicos en su catálogo.
“Berlín es una urbe increíble llena de energía – explica Nick Jones, fundador y presidente del grupo–. Este edificio me sorprendió desde que lo descubrí y pensé que sería perfecto para nosotros. Su historia y dimensiones nos ha permitido hacer todo lo que queríamos”. Soho House trabajó con Alex Michaelis de Michaelis Boyd Designs y con la interiorista Susie Atkinson para rejuvenecer el edificio.
“El interiorismo es diferente respecto a los otros Soho, certifica. Tiene un estilo relajado pero glamuroso muy años treinta. El estilo del entorno tiene mucho que decir”, comenta.
“Todos nuestros proyectos tienen piezas vintage que sirven de hilo conductor al resto del diseño”, explica Vicky Charles, directora de diseño del grupo Soho House. “Buscamos, coleccionamos y cuidamos piezas únicas que ayudan a darle autenticidad al espacio. Le devuelven un pasado y permiten crear espacios confortables en los que vivir. Normalmente, lo que mejor funciona es lo que no buscamos y que puede venir de un encuentro inesperado en un mercadillo o una búsqueda fortuita en eBay”, confiesa.