MiiN Cosmetics, la marca de cosmética coreana de referencia en Europa, apuesta por consolidar su crecimiento en España y lo hace por todo lo alto con la apertura de su primera tienda insignia. ¿El lugar elegido? La ciudad de Barcelona. Y por ello, ha elegido un local acorde con sus expectativas y objetivos: diez veces más grande que sus boutiques habituales y equipado con todo lujo de detalle. Concretamente, se encuentra ubicado en el centro de la ciudad, en Calle Balmes número 5 y ocupa más de 400m2 distribuidos en dos plantas, entre los que se encuentran las cabinas de tratamientos faciales y servicios de manicura y pedicura
"Nuestra Flagship de Barcelona, no es otra tienda más, es el hogar de K-Beauty. Queremos que sea una parada obligatoria para vivir toda la experiencia de la cosmética Coreana. Esta nueva tienda reafirma nuestro compromiso de traer los mejores productos de belleza coreana a España y probar una nueva línea de negocio basada en ofrecer experiencias de cuidado personal de alta calidad para nuestros clientes. Es por eso que para mí este local es mucho más que una nueva tienda, es la pura representación de lo que es la cosmética coreana, desde los productos hasta los cuidados, pasando por la experiencia en tienda", nos explica Lilin Yang, cofundadora y CEO de la compañía.
Con el rosa como color por excelencia y de estilo minimalista
"Cuando se diseñó la marca MiiN, uno de los principales objetivos era crear una identidad de marca que pusiese en valor el aspecto diferencial que teníamos como retailer, y el color rosa fue un elemento clave ya que, por aquel entonces, no era muy común en el branding de retailers del sector Beauty", nos cuenta Lilin. Un tono que con el paso del tiempo fue cogiendo fuerza hasta consolidarse como su color por excelencia. "Con los años, el rosa ha ido cogiendo fuerza en el sector, y durante el proceso de rebranding del año pasado incluso nos planteamos cambiar el color para mantener el posicionamiento diferenciador. También surgían dudas respecto al rosa por ser un tono tradicionalmente asociado a lo femenino y a lo infantil, cuando nuestro objetivo es romper las barreras de género y los estereotipos asociados al cuidado de la piel, ya que todas las pieles deberían cuidarse", sigue explicando Lilin. Finalmente, pero, decidieron mantener el color por ser parte de la esencia MiiN.
"Todas nuestras boutiques cuentan con un enfoque minimalista para destacar todos nuestros productos. La Flagship de Barcelona es diez veces más grande que el resto de nuestras tiendas habituales y ofrece más de 40 marcas coreanas además de nuestras marcas propias: ‘Ondo Beauty 36.5’ y ‘Meisani’. En esta tienda, hemos querido incorporar cabinas para tratamientos faciales, manicura y pedicura realizados únicamente con productos coreano", nos sigue contando Lilin. Todas las tiendas son diseñadas internamente en colaboración con interioristas especializados para adaptar correctamente el concepto a todas las tiendas, que tienen dimensiones y distribución única, y así optimizar al máximo el espacio y la experiencia de compra.
De necesidad personal a un imperio
La historia de MiiN Cosmetics tiene como punto de partida el traslado de Lilin a España. "Todo empieza en 2014, cuando la cosmética coreana era algo muy lejano aún en Europa. Cuando me mudé a España en 2005 para estudiar mi carrera universitaria, no dejé de viajar a Asia cada año. Durante los viajes aprovechaba para traer mis cosméticos favoritos y tratamientos que solo podía encontrar allí, en Seúl concretamente", explica Lilin. Hasta que llegó un día que decidió poner punto y final a la situación. "La idea de viajar tantos kilómetros para hacerme con mis productos favoritos me hizo plantearme por qué la cosmética coreana no se conocía aún en Europa siendo de tan buena calidad. Podemos decir que en cierto modo, la creación de MiiN, nace de una necesidad personal. Mi objetivo era traer mis marcas favoritas a Europa, para poder tener al alcance mis productos fetiche y además permitir que las europeas descubrieran sus excelentes propiedades. Me puse manos a la obra y en 2014 abrí la primera tienda en Barcelona, a las que después se sumaron Madrid, Múnich, Milán y Valencia", sigue contando la fundadora.
"Queremos expandirnos tanto en España como en las principales ciudades de Europa y aumentar la presencia en los países en los que ya estamos. De hecho, nuestro objetivo es llegar a los 100 puntos de venta en 2028. Por el momento no podemos adelantarte mucho más", explica Lilin. Un imperio que no ha hecho más que empezar y seguro pronto tendremos muchas novedades.
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