“Soy una apasionada de las bodas y de los eventos, y después de muchos años trabajando en la hostelería como directora de un hotel, y estar al cargo de cada mínimo detalle, decidí que era el momento de emprender el proyecto que tanto deseaba. Y así nació Marie in Lisbon”, nos cuenta Marie Guérend Blot, fundadora de la marca. Anteriormente, Marie era la directora de Le Consulat, un famoso hotel ubicado en pleno centro de Lisboa. Pero no era una directora cualquiera, era de las que cada mañana compraba todo los periódicos imaginables, para cada huésped del hotel, así como flores frescas, velas y mucho más. Una forma de hacer que le ha llevado a abrir su proyecto.
“La ciudad de Lisboa y sus alrededores esconden lugares únicos que merecen ser descubiertos y vividos. ¿Y qué mejor para hacerlo en tu propia boda, uno de los lugares más importantes de la vida y que van a quedar para siempre en la memoria y el corazón”, dice Marie. Amante de descubrir lugares excepcionales y vivirlos en sus ratos de desconexión, era el momento de darlos a conocer a más gente y que pudieran disfrutarlo tanto como lo hacia en ello. Un cúmulo de señales que han dado lugar a Marie en Lisbon.
Un nombre con historia
“Soy francesa y portuguesa, y quería tener un poco de todo en la compañía y en particular, en el nombre. Y un día, mientras estaba viendo la serie de Emily en Paris de Netflix, ví totalmente la conexión: París y Lisboa = Marie in Lisbon. La protagonista de la serie cuenta su vida en la ciudad, y descubre rincones únicos. Yo quería hacer un poco lo mismo pero pasado a eventos y bodas, así que decidí que era el nombre por excelencia”, sigue explicando Marie.
Rincones únicos…
“Cada evento es una nueva aventura, ya sea una gran boda o un pequeño aniversario, todos y cada uno de ellos es excepcional y merece ser tratado con el mismo cariño. Así, para mi el trato personal, conocer la historia que hay detrás, los objetivos y emociones es básico para poder hacer mi trabajo como creo que se tiene que hacer. Cada detalle cuenta. Así, el proceso se inicia con una reunión, informal pero muy reveladora”, dice Marie. A partir de entonces, es momento de encontrar el lugar espectacular, y si puede ser desconocido por muchos, que dará lugar al evento. “El lugar es clave, tiene que ser único, un descubrimiento y esta es la parte esencial y más disruptiva del proyecto. En la actualidad no hay nadie en Lisboa que haga esto, y yo tenía que ser la pionera porque adoro la ciudad y que considero hogar y hay mucho desconocido aún”, dice Marie con mucha ilusión.
… para todo tipo de eventos
“No tengo límites en cuanto a eventos, obviamente cada caso es único y se tiene que analizar pero me atrevo a todo. Cuando hay ganas y sobre todo pasión por lo que uno hace, todo se puede hacer (o casi todo)”, dice Marie. De grandes bodas a otras más pequeñas; aniversarios, comuniones, fiestas de empresa… Hay un rincón para cada celebración. "Para hacer posible Marie in Lisbon estoy en proceso de exploración constante, una aventura que nunca se detiene. Nunca dejo de buscar lugares y proveedores, personas con talentos que puedan aportar otra dimensión al evento".
Producto de proximidad y gran calidad
“A parte de una curada lista de espacios, es esencial también disponer de todo el resto (y es mucho) para hacer realidad el evento. Para ello, dispongo de conexiones con todos los servicios -desde vajillas únicas, pasteleros exquisitos, caterings para todos los gustos, DJ, fotógrafos…-. Todos ellos trabajan en la mayoría con productos locales y por supuesto, de una excelente calidad de manera que al tener una base muy curada, sé fácilmente que necesita cada evento y como conseguirlo", dice Marie. Ella elige cuidadosamente a cada miembro de su equipo, asegurándose que encarnan el espíritu de Marie in Lisbon: autenticidad, dedicación, pasión por cuidar a las personas durante este importante hito en sus vidas, extrema profesionalidad y sobre todo atención a los detalles.
Marie, una mujer de ideas claras que convertirá tus eventos en ocasiones únicas e inolvidables. Un servicio disponible en Lisboa pero que muy pronto saldrá del territorio para implementarse en otras ciudades. ¿El próximo destino? Todo apunta que será Barcelona.
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