Descubrimos la reforma parcial de una vivienda ubicada en el distrito La Floresta de Sant Cugat del Vallès, una intervención realizada por la interiorista Cláudia de Sousa con el objetivo de dotar de luz y amplitud el living de esta casa. Un espacio en el que la familia quería poder compartir sus momentos del día a día, pero el cual no era práctico ya que estaba compuesto por espacios muy cerrados en los que la iluminación natural se veía obstruida.
Para ello lo primero que hicieron fue tirar las paredes del hall de entrada, eliminando a su vez un armario empotrado que bloqueaba el espacio funcionando de separador y la pared divisoria entre cocina y salón, integrando ambas estancias. El resultado: una cocina y recibidor abiertos con una península que comunican con el comedor y la sala de estar.
Una reformar que destaca por los tonos claros y empolvados que se han elegido para el mobiliario tanto de la cocina como del comedor y salón, cromatismo que aporta mayor luminosidad y que, gracias al acabado en mármol de la encimera y península y las texturas de terciopelo, genera una estética muy elegante y sofisticada.
“Cada vez más el espacio entre salón y cocina se diluye, entonces dibujamos cocinas que son una extensión de este espacio, definiendo un espacio ‘living’”
Se consigue así una estancia única amplia y luminosa, perfecta para ser vivida en conjunto por toda la familia sin límites ni barreras. El espacio comunica así por completo con el exterior, para poder hacer vida en el salón o la cocina mientras ven las plantas del jardín.