Ubicado a unos pasos de una de las arterias principales de la capital Condal, el Consulado General de Italia, abrió a mitad de junio las puertas de su nueva sede situada en la calle Aribau 185. Un traslado a un enclave privilegiado de Barcelona que se debe al crecimiento exponencial de la población italiana residente, la cual ha aumentado un 40% en los últimos 5 años, dejando a la anterior sede obsoleta para poder ofrecer servicios adecuados a los 108.000 italianos residentes en un área que comprende desde Aragón a Murcia incluyendo Cataluña, la Comunidad Valenciana, las Islas Baleares y Andorra.
Esta nueva superficie de 1.000 m2 cerca de la avenida Diagonal, se organiza en una sola planta y cuenta con un amplio espacio para la recepción de los usuarios y la realización de actividades de promoción integrada del Sistema Italia, ya que Barcelona alberga alrededor de 30.000 italianos censados, la mayor comunidad extranjera de la ciudad. “El espacio, más moderno y funcional que el anterior, supondrá un prestigioso escaparate del Sistema Italiano en España y hará más eficaz la prestación de servicios consulares a los compatriotas residentes en la circunscripción de Barcelona así como a los amigos españoles que aman Italia y que encontrarán aquí un nuevo punto de referencia”, subrayó el Embajador Riccado Guariglia.
“El espacio del nuevo Consulado General de Italia en Barcelona se basa en un concepto totalmente innovador y nace del firme compromiso del Ministerio de Asuntos Exteriores en favor de las colectividades italianas en el extranjero”
© Lagranja
El proyecto de renovación del espacio es el resultado de la valiosa colaboración entre diferentes agentes: el estudio de arquitectura Imad de Alberto Formatger para la distribución de los espacios y la parte técnico-legal, junto a Lagranja, cuyo co-fundador es italiano Gabriel Schiavon, para la parte de interiores, y Michela Mezzavilla para el diseño de iluminación. “El proyecto realizado para la nueva Sede del Consulado Italiano de Barcelona, es el resultado de una compleja sinergia entre arquitectura, tecnología, seguridad, funcionalidad y estética”, expone Alberto Formatger.
La renovación del Consulado General de Italia profundiza en el papel del diseño en la renovación de los espacios institucionales, una nueva orientación a la hospitalidad, la belleza y el bienestar organizacional, que implica involucrar las excelencias del diseño para convertirse en un espacio de encuentro y promoción de los valores y talentos del Sistema Italia.