Abrir una ventana al mar, ese fue el objetivo de UD'estudi cuando los propietarios de esta vivienda en Sant Vicenç de Montalt les pidieron su rediseño. Un proyecto que se centró en la relación entre las personas y el espacio que habita como algo transformable, dejando que sean las reglas cotidianas de cada individuo las que marcaran la funcionalidad de los espacios.
Es por esta razón que la distribución tenía que contemplar la parte más funcional de la vivienda, así como tener en cuenta los momentos y eventos que tendrán lugar, creando rincones desde todas las perspectivas que den como resultado espacios con una esencia única. Este nuevo planteamiento se llevó a cabo después de derribar toda la distribución original convirtiendo la superficie del apartamento en un único ambiente listo para dibujar sobre él una nueva disposición de las estancias y crear un hogar que refleje el carácter de sus habitantes.
Un nuevo reparto que cuenta con un eje central que divide el piso en dos zonas: la de día y la de noche. El salón - comedor, la cocina y la habitación principal fluyen sin tabiques que se impongan entre ellas, creando un juego de separaciones y transparencias que combinan materiales como el cristal, la madera y la piedra natural con un mobiliario diseñado exclusivamente para el proyecto.
Una vivienda de 86 m2 que toma como fuente de inspiración el entorno natural por lo que los acabados naturales de la piedra y la madera se combinan con las últimas innovaciones tecnológicas y formas arquitecturales del estilo minimalista más puro. Una metáfora tangible que traslada al hogar las sensaciones que la Tierra nos transmite.