En el Carrer Solitari de la localidad de Cadaqués se esconde un edificio diseñado por Tusquets a finales de los sesenta. En la parte más alta, ahora, Nuria Selva ha dejado su huella en este ático en el que se respira el estilo mediterráneo más veraniego.
Se trata de un piso de 89 metros cuadrados con unas vistas directas al mar. “Entré y supe que era el indicado, a pesar de la subida a pie para llegar, de los tres pisos de escaleras o de que no tenía parking. Me enamoré a pesar de las complicaciones, como me suele pasar con tantas cosas en la vida”.
Aunque es un apartamento que no destaca por tener un gran espacio en todas sus estancias, la arquitecta ha conseguido, a través de una reforma, reorganizar cada rincón de la casa para convertirlo en un lugar harmonioso y lleno de vida. Como resultado, un piso que cuenta con un salón, un comedor, una cocina, dos baños, tres habitaciones (una de ellas con vestidor) y un despacho.
Diseño: Nuria Selva. Foto: Jordi Casanova
Selva también ha procurado respetar algunos elementos característicos de la casa como sus chimeneas de hierro originales, los muebles blancos de obra y sus dos patios interiores (los encargados de que la luz sea lo que más tiene este hogar), que convierten este oasis de la Costa Brava se presenta como un caramelito para disfrutar de cada verano. ¡Veamos algunas de sus estancias!