A pesar de que en el último año muchas empresas han apostado por el teletrabajo como una manera óptima de funcionar, otros centros de trabajo, sin embargo, han preferido convertir las oficinas en lugares cómodos y tranquilos. Espacios que, como el despacho de abogados Cañizares Valle, ha contado con un rediseño de sus salas de la mano del equipo de Xavier Lledó de Lledó Arquitectura & Interiorismo, quienes no han dudado en proyectar un despacho de lo más cálido y agradable en el centro de Valencia.
El uso de materiales naturales ha sido imprescindible en la creación de este despacho cuidado que pone el ojo en el bienestar del trabajador. El objetivo, además de crear un espacio renovado, era el de no olvidar la esencia y valores de una empresa con más de 50 años de historia. Para ello, el estudio de interiorismo no dudó en rodearse de firmas notables como Bk Contract, Bonaldo, Glamora, Lema, Andreu World, Flos, Occhio, Arkos light, Interface y Momocca; quien desarrolla un rol de importancia a través de las múltiples configuraciones de su Colección más veterana: Adara.
Desde el primero momento, se ha tratado de sacar partido a la esencia misma de los materiales que predominan en cada estancia, la exquisitez en el tratamiento de estos y el diseño. De hecho, el contraste entre paredes, suelo y mobiliario refuerza la importancia de la materialidad, invadiendo desde la recepción hasta las oficinas y salas de juntas. Todo ello crea un efecto de continuidad en términos estéticos y decorativos que armoniza todo el espacio.
El cuidado diseño de interiores permite, de manera sincera, que todas las salas tengan la misma importancia.
El resultado del proceso de rehabilitación es un despacho de abogados en el que el interiorista ha sabido captar el alma del espacio y transmitirla a través de la sinceridad en el diseño y la materialidad.