En pleno Eixample barcelonés, encontramos esta bella terraza, ideal para disfrutar del buen tiempo, sin prisas ni agobios. Es un trabajo que firman Meritxell Ribé y Josep Puigdomènech, fundadores de The Room Studio. Forma parte de un amplio proyecto de rehabilitación de una vivienda de gran superficie (230 m2), en la que se buscó obtener zonas luminosas, dialogantes, cómodas y actualizadas a la medida de las necesidades de sus nuevos propietarios.
Se mantuvieron algunos elementos originales (como arcos de paso y molduras), aunque se apostó por una estética muy contemporánea, con piezas de diseño y materiales nobles. Así, en el lugar más privado de la casa, el dormitorio principal, se incorporó un espacio para poder disfrutar de la televisión y también destinado al descanso –esta área ayuda a dotar a la habitación de funcionalidad– anexado a la terraza, donde pasar un buen rato leyendo, descansando o tomando el sol. Siempre con la idea de potenciar la sensación de confort y proyectando con mucha sensibilidad.
La vieja terraza era un rincón de la casa olvidado porque había quedado obsoleto. Los porticones se encontraban en mal estado, pero eran representativos de las fincas de la zona, así que The Room Studio apostó por restaurarlos y conservar su color azul. En el suelo, se sustituyeron las antiguas baldosas de barro cocido por listones de madera de gran formato, con los que revistieron también la barandilla, unificando la estética de este maravilloso espacio. Hoy, uno de los favoritos de la familia.