Cuando llega el invierno, nos trasladamos dentro de casa, buscando la calidez y el confort del que carece el exterior. Además, la situación actual nos ha obligado a llevar gran parte de nuestra actividad al interior. Ahora se teletrabaja, se realizan clases online, comidas familiares en petit comité, tardes de sofá y mantita viendo una serie… Por eso, necesitamos que nuestros interiores se adapten tanto a la estación invernal como a los nuevos hábitos, de manera que sean confortables y nos permitan movernos cómodamente.
Antes de buscar unas nuevas cortinas, una mesa de comedor que crezca de tamaño o empapelar una pared, es preciso aclimatar la vivienda y apostar por una distribución que nos haga la vida más fácil, saque partido al espacio disponible, resulte funcional, sin perder de vista la estética, y que, además, permita la comunicación entre los diferentes ambientes. Sin olvidar, potenciar el aislamiento térmico y acústico, capaces de crear una atmósfera cálida y sin molestos ruidos extra, sin elevar nuestra factura energética.
Lo ideal es apostar por pequeñas reformas que permitan aprovechar al máximo los espacios, haciéndolos, al mismo tiempo, más confortables. Y es aquí donde entra en juego, la placa de yeso laminado Habito® de Placo®, la revolución de las paredes. Un sistema constructivo que no solo contribuye a mejorar el aislamiento acústico y térmico, sino que también ofrece una gran resistencia a cargas y a impactos y aporta un plus de seguridad frente al fuego, sin meterte en grandes obras. Conoce a fondo lo que puede hacer por ti y por tu casa.