El verano está a la vuelta de la esquina y aunque es tiempo de vacaciones, no siempre es posible disfrutar de vacaciones a largo plazo, seguro que en algún momento toca trabajar con las altísimas temperaturas. Una tortura si no se dispone de un lugar equipado y ambientado con lo necesario para no sufrirlo. Y aunque puede parece una cosa obvia, o incluso innecesaria, la realidad es que cuando uno se encuentra frente al ordenador sudando la gota gorda no apetece para nada. ¡Socorro, piscina por favor!
Una situación que se puede evitar perfectamente, si se equipa con lo imprescindible. Pequeños cambios e incorporaciones que se van a notar muchísimo y harán que las altas temperaturas no sean un inconveniente para superar las jornadas (que a veces son muy largas). Pasos que se pueden aplicar en una oficina en casa, para quiénes hagan telework, o también en oficinas. Solo es cuestión de adaptarlos a los metros que cada uno disponga y listo.
Trucos para preparar tu rincón de home-office veraniego