A 40 kilómetros de Barcelona, en la localidad de Matadepera, nos encontramos con esta genuina vivienda donde la disposición de diferentes volúmenes es la protagonista. Su creador, el arquitecto Joan Folch -de Folch Arquitectes- proyectó esta residencia de manera que, sus formas, jugaran con el cuerpo paralepípedo de la parcela y rompiera con la forma de este.
Para ello, la planta se estructura mediante una disposición geométrica oblicua que genera un dinamismo al conjunto. A su vez, los diferentes volúmenes y piezas se ubican alrededor de un original patio central desde el cual se organizan todas las estancias. El hormigón de la estructura se combina con las amplias y ligeras vidrieras de la planta baja que generan una sensación de gravitación de los módulos superiores. Es este efecto el que hace esta construcción única.
Entre los grandes voladizos de la planta superior sobre salen amplios ventanales que continúan con ese efecto liviano y de transparencia que integra el interior en el exterior. Para lograr este efecto ha sido necesario contar con unos cerramientos apropiados que permitieran aunar diseño, ligereza y prestaciones. TECHNAL combinaba todas estas características en sus vidrieras, facilitando la elección de cerramientos específicos para las diferentes estancias.
Las grandes transparencias descargan el peso de los materiales que conforman la estructura y los diferentes espacios. Los volúmenes quedan moderados con una estructura clara y fluida. Para lograr el correcto aislamiento todos los huecos quedan enmarcados con un sistema de carpintería de aluminio TECHNAL, fabricados e instalados por el industrial Aluviper 2002, de la Red Aluminier TECHNAL.
Fotografía: Jordi Miralles