El dormitorio es la estancia en la que nos relajamos, desconectamos y dormimos, o eso debería ser. Un templo del relax donde sentirse a gusto. Pero no siempre lo es, y la decoración y el orden tienen mucho que ver con ello. Una mala distribución del espacio, una estancia desordenada o llena de cosas innecesarias, el exceso de aparatos electrónicos y cables o una mala elección del color del dormitorio pueden arruinar tu descanso o tus horas de desconexión.
Pero estas no son las únicas causas que hacen que un dormitorio sea estresante. Hay cantidad de detalles que influyen en las sensaciones que provoca un ambiente. Por eso, si quieres que tu dormitorio invite verdaderamente al descanso, te explicamos 11 características que tienen en común los dormitorios que provocan estrés. Y es que las habitaciones agobiantes comparten características, y conocerlas es la única forma de que las evites.
Lee atentamente y piensa: ¿De cuál o cuáles pecas tú? Una vez que hayas detectado todos los aspectos que hacen que tu habitación te produzca estrés, aplica uno a uno los consejos que te damos a continuación para poner remedio a los errores que encuentres. Cuando hayas finalizado, ten por seguro que el aura de tu dormitorio se habrá transformado completamente. Adiós dormitorio estresante, hola remanso de paz. Ahí van los errores más comunes que comparten los dormitorios que no transmiten paz y las soluciones que puedes aplicar al respecto.