Rentabilizar el espacio es optimizar el tiempo. ¿U optimizar el espacio es rentabilizar el tiempo? Tanto monta, monta tanto. Y es que, al final de lo que se trata es de aligerar y agilizar nuestras mañanas. Los expertos cuentan que un armario bien ordenado es un antídoto para el estrés, y el primer paso para lograrlo es hacerte con un ropero que, además de bonito, se adapte 100% a tus necesidades. Después, solo quedará llenarlo y prepárate para lucirlo por dentro, ¡y por fuera!
Además de los beneficios a nivel de bienestar, está la cuestión de la practicidad. Disponer de un armario en condiciones nos evita el cúmulo de ropa y zapatos, y no creas que hay que renunciar a los diseños bonitos en favor del orden.
Más allá de la estética
Un armario puede tener un diseño atractivo y funcional al mismo tiempo que, por un lado, ejerza de mueble decorativo y, por otro, nos facilite la vida y no perdamos tiempo cada mañana buscando la ropa que no sabemos donde hemos metido. Además, hoy en día es muy fácil combinar una y otra cosa en un mismo mueble sin necesidad de dejarse una gran fortuna. Los hay para todos los gustos, estilos y presupuestos.
Desde armarios de madera, de colores, con espejo; de estilo vintage, clásico, moderno; empotrados, exentos, abiertos, con cajones… Escoge el que más te guste sin olvidarte de que debe encajar con el resto de la estancia, pero sin quitarle el protagonismo que merece. Y es que, aunque a veces los cabeceros más originales le quiten protagonismo, el armario puede hacer que tu habitación gane muchos puntos en materia de estilismo.