Texto: Inés Martín Tiffon
Aunque las temperaturas no terminan de ubicarse, el otoño está aquí y con él se inaugura la época más acogedora de todo el año, momento perfecto para abrigar la casa y dotarla de calidez.
La estilista y decoradora Mar Gausachs nos ha preparado 5 consejos - fáciles de aplicar y asequibles a nivel presupuesto - para adaptar la decoración de casa al otoño. Ha recorrido todas las estancias de un hogar para que no quede ningún rincón sin su dosis extra de calidez.
A grandes rasgos, Mar nos anima a llenar de cojines y plaids el sofá. Y es que no hay mejor sensación que sentirte arropado - literalmente - por una decoración cálida y acogedora. Pero, ¿en qué se traduce esta decoración acogedora? La estilista lo tiene claro, “texturas invernales y abrigadas, la lana, la piel girada o el ante”. Y sigue: “En el salón los textiles lo son TODO, en mayúsculas, y deben ir variando en función de la estación”.
Entrando en la paleta cromática, el otoño tiene una gama de colores muy marcada, así que esta decisión será un poco ‘sota, caballo y rey’. ¿Te imaginas los colores ideales para decorar la casa en otoño? Naranja calabaza, terracota, verde musgo, morado berenjena, marrón chocolate, caramelo, y una infinidad de matices más.
“Es importante entender que no hace falta añadir colores otoñales a toda la casa”, puntualiza Mar. “De hecho, en el dormitorio, siempre funcionan mejor las paletas cromáticas neutras y claras, el blanco, el beige o el color piedra”. Bajo esta premisa, la estilista aconseja dejar la misma funda nórdica (esta vez con el edredón para paliar el frío) y adornar la cama con más cojines y mantas. Sin movernos de los neutros, podemos apostar por la lana cardada - de pura actualidad -, la trenzada o los cojines de pelo. Este tipo de tejidos añaden un punto rústico a la decoración, pero, ¿quién no sueña con refugiarse del frío en una casita en la montaña?
Si ya has tomado la decisión de añadir color a tu dormitorio otoñal, el verde musgo es el tono estrella de la temporada, y en cuanto a estampados, los cuadros también vienen pisando fuerte.
Adaptar la cocina a la estacionalidad es cuestión de detalles. Mar Gausachs nos propone “colocar un gran cuenco de madera y llenarlo de calabazas o, si se quiere ser menos explícito, de alcachofas”. Básicamente la clave está en decorar con frutas y verduras de temporada. “Es una forma divertida de añadir color a esas cocinas de color blanco”, añade la estilista.
Tanto el baño como la cocina son estancias a las que no solemos hacer tanto caso decorativamente hablando, pero que con pequeños toques podemos conseguir una estancia totalmente renovada. “Siempre y cuando la decoración actual del baño nos lo permita, podemos jugar con toallas en tonos cálidos o verdes. Con los accesorios de baño a conjunto. Y el tercer elemento clave para un baño otoñal es añadir una vela, que incluso sin ser encendida, desprenda olor”, explica Mar.
No nos podemos olvidar de los aromas, tanto en mikados como en velas. En cualquier estancia. Mar propone olores de otoño como maderas - ámbar, musgo, cedro, sándalo, maderas, pachuli, vetiver, ciprés - o florales - nardos, jazmín, jengibre y naranja-.
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