Tras estrenar la primavera, balcones, terrazas y jardines recuperan su esplendor como una extensión más del hogar. Apetece salir, sentir la brisa en el rostro y respirar la paz que emanan los meses primaverales, con el sabor de un verano inminente. Es por ello que las propuestas con más estilo se apoderan también de los espacios outdoor, con grandes dosis de diseño, pero siempre con materiales resistentes a la suciedad y las inclemencias del tiempo.
El aluminio es, en este sentido, uno de los que ofrece más ventajas, al repeler el agua y la humedad y apenas verse afectado por los golpes. También lo es la madera de teca, por su alta durabilidad y resistencia natural, además de por su color, que seduce igual que lo hacen las fibras vegetales. Puedes decantarte por estructuras de bambú, mimbre o ratán (si lo prefieres, en su versión sintética) y completar el conjunto con plantas, textiles y objetos decorativos para añadir notas de color. De todas formas, ten en cuenta que habrá piezas solo aptas para porches. Asegúrate de ello antes de tomar una decisión.