Precursor de la mezcla de estilos y épocas en decoración, herencia de sus orígenes como anticuario, Lorenzo Castillo, Premio Interiores a la Trayectoria Internacional, también lo viene aplicando magistralmente a la hora de hablar de textiles. Aquí te mostramos siete claves para saber rodearte de la belleza que emana de cada textura, de cada estampado, de cada color, de cada confección…
Tú también puedes adoptar su estilo ecléctico tan admirado en numerosos proyectos residenciales y contract dando rienda suelta a la creatividad que te proporciona el universo de los textiles que existe hoy en día. Toma nota de sus palabras.
1. Sin miedo al uso de distintos estampados dentro de una misma habitación.
Motivos vegetales, geométricos, rayas, lisos… Todo puede funcionar en un mismo espacio, y juegas sobre seguro si forman parte de la misma paleta cromática.
2. Atrévete a hacerle un dosel de tela a la cama.
Puede parecer una idea trasnochada más propia de tiempos pretéritos, pero resulta tremendamente decorativo, además de favorecer el sueño de quien yace en la cama. Es como una vuelta al vientre materno.
3. Escoge una tela que te guste y haz con ella una pantalla.
Olvidémonos de las pantallas tradicionales y haz una pantalla con una tela estampada. Es probable que no deje pasar la luz, pero poniéndole el interior de charol dorado, conseguirás un bonito haz de luz indirecta que emana del interior con un efecto muy acogedor.
4. Hagamos estores con telas estampadas.
Olvidémonos por un momento de las muy manidas telas de visillo si lo que buscamos es un efecto dramático, como el espacio de la foto. Eso sí, el fondo de la tela tendrá que ser siempre blanco.
5. Arriba el terciopelo.
Y más aun ahora que comienza a acechar el frío. Aportan calidez y calidad a cualquier estancia. Atrévete a combinarlos entre sí, como en esta foto, donde conviven un cut velvet con un falso liso, con otro estampado
6. El uso de la pasamanería.
No tiene porqué estar limitado a almohadones y butacas. Marcar el perímetro de una habitación con un gros grain o una greca aporta riqueza y calidez, al tiempo que amplía visualmente los volúmenes de un espacio.
7. Un mueble, varias telas.
Como ocurre en esta foto, la tela de la tapa de un puf puede ser perfectamente distinta a la de la base, así como en una butaca, el asiento, el respaldo y la trasera pueden ir maravillosamente tapizadas con textiles distintos. No hay mayor ventaja que la meramente decorativa. El efecto es mucho más divertido y aporta movimiento a la estancia.