El deseo de disfrutar de esta segunda residencia durante todo el año, es lo que motivó a su propietario a reformarla completamente. Esta casa adosada está situada en la emblemática y turística urbanización de Empuriabrava (Girona), a apenas dos horas de distancia de Barcelona, donde tiene su vivienda habitual, también reformada por Tinda’s Project.
La vivienda forma parte de la marina residencial que caracteriza esta urbanización construida cerca de la playa y alrededor de una extensa red de canales artificiales inspirados en la ciudad de Venecia. Y aunque es un destino vacacional, el propietario no quería que las estancias desprendieran una estética muy estival porque va a disfrutar la casa de enero a diciembre.
Balcón de estilo natural frente al salón con vistas al mar y el puerto Foto: Mercè Gost
La habitual paleta cromática de grises que caracteriza todos los trabajos de Tinda’s Project, en este proyecto se ha suavizado bastante haciendo uso de colores claros, tanto en los textiles como en el mobiliario y los revestimientos, “buscando ese guiño al carácter mediterráneo que envuelve la casa, pero sin resultar excesivo”, explica Eva Mesa, co-fundadora del estudio de interiorismo.
Todo el mobiliario y equipamiento se ha realizado a medida y combina tres tonos: blancos, grises muy suaves, y los beiges de las maderas y texturas naturales
Eva Mesa, co-fundadora de Tinda's Project
La casa, de poco más de 100 m2 interiores y 50 m2 de exteriores, se distribuye en tres plantas (sótano, planta baja y primer piso), además del solárium de la cubierta, en una distribución de espacios, totalmente pensada para una persona que vive sola. El acceso desde la calle da directo a una planta abierta que acoge los principales usos más sociales, es decir, salón, cocina y comedor, todo alineado a la izquierda para dejar el paso despejado hacia la terraza, situada al fondo y con acceso directo al embarcadero.