Tal como cuenta Rubén Da Silva, cofundador y director de proyectos de Brákara Studio: “El mayor reto al que nos enfrentamos en este ático de Barcelona fue aprovechar al máximo los metros de los que disponíamos. Sin contar la terraza, el interior no era tan generoso, se trataba de un piso muy pequeño. Y, como originalmente estaba compartimentado en exceso, además pecaba de sombrío. Debido a ello, buscamos que los espacios fueran diáfanos y atrajeran el máximo de luz natural posible”.
En todo el ático se ha experimentado con materiales como la madera, la piedra o el cemento. Pero también hay otro hilo conductor: una paleta cromática en la que predominan las tonalidades oscuras.
Foto: Jordi Folch
¿Se puede decorar con colores oscuros un piso pequeño?
“Como en la actualidad goza de más luz en conjunto, pudimos darnos el lujo de oscurecer la parte inferior de las estancias –algo ostensible en el pavimento o el mobiliario–, y dejar en blanco la superior, para dar una mayor sensación de amplitud”, apunta.
¿Se trata de un truco aplicable a cualquier vivienda? La respuesta es sencilla: “La gente piensa que los colores oscuros empequeñecen los espacios. No obstante, siempre y cuando tengan mucha, mucha luz, pueden integrarse en la base porque potencian la profundidad y, visualmente, agrandan los ambientes”.
Ahora que ya hemos visto a grandes rasgos las claves de la reforma, ¿quieres ver el Antes y Después? Acompáñanos.