Pequeño, pero con los metros justos y necesarios. Este piso a las afueras de Murcia fue adquirido por una pareja joven que quería un hogar funcional y sencillo. La idea estaba clara, y era el momento de ponerse en contacto con el estudio de interiorismo Musart Interiorismo.
La distribución estaba bien, por lo que entrar en obras no era necesario. Con un lavado de cara era suficiente. Era un piso poco luminoso y con una decoración incoherente.
El primer paso fue pintar las paredes de blanco, color que se convertiría en la base de todo el proyecto. Este tono predomina en toda la casa, pero en concreto, en el dormitorio y el despacho, que han sufrido un “Antes y después” increíble como poco.
“Pequeñas dosis de color negro conectan las diferentes estancias, aportando modernidad y carácter”, aseguran desde Musart Interiorismo.
Descubre el “Antes y después” del dormitorio y del despacho