Tan solo escuchar (o leer) su nombre, este apartamento ya nos advierte de cómo será la decoración en su interior. O, si más no, de los colores que habrá usado. Refugi Blau en catalán o Refugio Azul en castellano, es una pequeña segunda residencia en Menorca, pero llena de estilo y, como no, de espíritu y estilo isleño.
La propietaria, de cuna sarda (nacida en la isla italiana de Cerdeña), se ha encargado de la decoración y de los estilismos de la casa, apostando, como no podía ser de otra forma, por los materiales y colores propios de las islas mediterráneas. En todas las habitaciones encontraremos tres elementos clave: el color azul, los tonos blancos y los materiales naturales (como madera, yute, ratán o cualquier otra fibra vegetal).
Farré & Costa Interiors, el estudio que ha liderado la reforma, ha querido continuar con el aprovechamiento de la luz que tiene la isla tanto en el interior como exterior con el objetivo de que la vivienda fuera nítida y práctica.
Foto: Laura Tomas Estilismo: Paola Gheis
La propietaria quería utilizar el apartamento como segunda residencia, principalmente fuera de temporadas, por lo cual era muy importante traer al exterior un comedor y una zona de relax con asientos para disfrutar de la terraza frontal.
Gracias a la apertura total del cerramiento de cristal, el interior se prestaba a que ambas zonas, exterior e interior, se conectaran para un uso compartido. La gama de colores azulados y blancos, usados para enfatizar el concepto de frescura de Menorca, se mezcla con algunos detalles naturales como en textiles e iluminación.
Si lo tuyo es el estilo mediterráneo y natural, echa un vistazo al proyecto completo y toma nota de las mejores ideas de decoración.